La plataforma se acerca a un modelo multimarca que engloba a escritores amateurs, firmas de prestigio, marcas reconocidas en el mundo del periodismo y, ahora, sus propios medios de nicho. Y apuesta por el pago para que todos los actores implicados ganen dinero.
Medium nació en 2012 como una plataforma para ampliar Twitter: ante el límite de 140 caracteres que por entonces tenía la red social, Evan Williams y Biz Stone -dos de las cabezas detrás de Twitter- decidieron crear una extensión del pajarito para que quienes quisieran explayarse pudieran hacerlo en un entorno adecuado y con sinergias tuiteras. En realidad no era muy diferente de Tumblr, el híbrido entre Twitter y un blog que un joven David Karp fundó en 2007 y vendió en 2013 a Yahoo por 1.100 millones de dólares.
Ahora, Medium ha evolucionado y ha dejado de ser un híbrido entre Twitter y Blogger: es un medio de comunicación. Pero no un medio tal y como lo entendemos, sino un medio contributivo que pertenece a todos y a nadie. La plataforma sigue siendo un híbrido en su esencia, pues es capaz de aglutinar en un mismo lugar textos de gente absolutamente desconocida con sesudos reportajes de las firmas más prestigiosas. Curiosamente, tienden a destacar las segundas, quizás fruto de que Medium sigue funcionando bajo un modelo de followers y 'me gusta'. Un algoritmo y la propia comunidad se encargan de otorgar relevancia a los mejores contenidos, quedando los de escasa calidad condenados a un ostracismo digital que los hace caer por su propio peso.
Medium, además, es un agregador de contenidos. Importantes cabeceras de la talla de 'The Washington Post', 'The Economist', 'Bloomberg', 'The Atlantic' o 'Wired' cuentan con un perfil en el que cuelgan íntegros algunos de sus contenidos más exclusivos. Los usuarios pueden leerlos gratis en la mayoría de los casos, pero Medium también tiene un programa de pago que por 5 dólares al mes o 50 al año mejora la experiencia y ofrece acceso a contenidos ocultos tras un muro de pago. Porque Medium tiene un paywall optativo que pueden elegir levantar para artículos concretos todos los escritores de la plataforma, sean medios reconocidos o blogueros amateur. La plataforma reparte con ellos, en función del número de lecturas y de las valoraciones de los usuarios, el grueso de la recaudación. Un buen autor puede generar 500 dólares al mes con un reportaje de calidad. El 8 % de los autores gana alrededor de 100 dólares al mes. ¿Cuántos medios tradicionales pagan eso por una pieza?
Medium lanza sus propias marcas de noticias
Ahora, Medium hará cierta competencia por su parte. La plataforma tiene identificadas las temáticas que más lectores congregan, y por ello ha lanzado una serie de cabeceras propias que tratarán esos temas bajo marcas que aspiran a competir incluso con los medios tradicionales que también cuelgan sus contenidos. Una de esas marcas es 'OneZero', una revista de tecnología. Las otras que ha lanzado hasta ahora se centran en negocios, salud y noticias de interés general. Todas contarán con colaboradores populares en la propia plataforma, así como contenidos que proceden de otros perfiles: puede que un escritor amateur con buena fama vea sus contenidos incrustados en una de las revistas de Medium, lo que le ayudará a ganar notoriedad, le permitirá alcanzar a más lectores... y le proporcionará más dinero. Habrá editores humanos seleccionando los contenidos, aunque se ayudarán de los algoritmos que permiten identificar a los autores con mayor tirón.
Medium está dispuesta a dar la vuelta a los
medios digitales y a la
relación de las plataformas tecnológicas con el periodismo. La compañía gastó 5 millones de dólares en contenido original en 2018. Es más dinero que el presupuesto de muchos medios de comunicación al uso. Pero también es cierto que
desde su fundación ha levantado 132 millones de dólares en capital riesgo. Y cuenta con Twitter detrás, aunque en realidad sea una anécdota: la
apuesta de Medium por el pago por contenidos llevó a la plataforma a
eliminar la publicidad como vía de financiación en 2017. Y su apuesta por el periodismo de calidad se remonta a 2013, cuando compró la revista 'Matter'. En 2014 ya lanzó algunas marcas de noticias, pero en aquel entonces la plataforma estaba demasiado verde como para saber qué rumbo iba a tomar. Ahora saben que su papel sigue siendo un
híbrido entre una plataforma para creadores y un medio de comunicación en sí mismo a modo de agregador de contenidos. Y esto hay que seguirlo de cerca porque podría decirnos mucho de los medios en la era digital.