Los medios de comunicación han sabido utilizar las herramientas a su alcance para atraer a los nativos digitales durante la cobertura de los Juegos Olímpicos de Río. A la hasta ahora invencible televisión, le han acompañado en el pódium los smartphones y los medios sociales. Los millennials prefirieron acceder a contenidos olímpicos en el canal de la NBC en Snapchat que en su homónimo televisivo.
Antes de que comenzaran los JJ.OO. de Río, el responsable de marketing digital de Adobe Europa occidental y del sur, Christophe Marée, predijo que estos iban a ser unos JJ.OO. “verdaderamente móviles”. Y no se equivocó.
En EEUU, Snapchat fue la plataforma elegida por 49 millones de usuarios durante la primera semana de competición, informa “Les Echos”. La NBC, la cadena que posee los derechos de los JJ.OO. en el país norteamericano, decidió trasladar la cobertura del evento deportivo del año a las plataformas sociales para atraer a los jóvenes. Para ello puso en marcha el canal “NBC Olympics” en Snapchat Discover con vídeos elaborados por un equipo de “BuzzFeed”.
En países como Francia, hay un 41% de usuarios que usa sus smartphones para seguir los deportes y la aplicación Francetvsport que France Télévisions lanzó durante los JJ.OO. fue descargada 700.000 veces. A falta de cuatro días para la conclusión de los Juegos, la cadena ya superaba el centenar de millones de visualizaciones de vídeos en todas las plataformas de Internet, cuadruplicando las cifras de Londres 2012. Además, la venta de publicidad online antes de comenzar el evento ya había crecido un 30% respecto a las pasadas Olimpiadas.
En España solo estamos ante una tendencia en auge. RTVE lanzó una serie de vídeos en Realidad Virtual para ver en su aplicación “Heroínas: Vive Río”, pero solo recibió 4.230 descargas. Sin embargo, RTVE.ES ha sido visitada por una media diaria de 2.398.000 visitantes únicos, un 94,5% más que los 1.232.631 registrados en los JJ.OO. de Londres. Según el comunicado del ente televisivo, casi el 60% de los usuarios lo han seguido desde dispositivos móviles (el 46,9% desde smartphones), frente a un 60% que siguió las Olimpiadas de Londres desde un ordenador. En cuanto a las audiencias en televisión, Londres 2012 registró más de 36,2 millones de espectadores (82,5% de la audiencia), mientras que Río 2016 se ha quedado en casi 32 millones (71,8% del universo televisivo).
A pesar de que todo apunta a que en la próxima cita olímpica las cifras de audiencias móviles se dispararán, por el momento la televisión resiste. La NBC ha visto cómo se hundía su audiencia un 17% en prime-time en comparación con Londres 2012, y los televidentes entre los 18 y 49 años, los más codiciados por los anunciantes, podrían haber caído hasta un 30%. Pero aún así, la cadena registró 27,5 millones de espectadores de media, el segundo promedio más alto para unos JJ.OO. tras Londres 2012 (30,3 millones) y sin contar las Olimpiadas domésticas. Tan solo unos meses atrás un acontecimiento deportivo de la magnitud de la Super Bowl alcanzó los 112 millones de telespectadores, consolidándose como el tercer evento más visto en la historia de la televisión.
Aún tendremos que esperar cuatro años para saber cómo quedará el pódium de las audiencias. En el pódium de los deportistas, quizás también haya cambios significativos… Sigue leyendo en: Tokio 2020.