Todo en 2002 de la mano de la brusca devaluación que tuvo lugar en el país tras la crisis del “corralito”. Si bien era indudable que el tipo de cambio hizo que el negocio resultase muy rentable, los argentinos prefirieron presumir que más que un tema de costes la proliferación de call centers en Argentina se debía principalmente a la alta cualificación de los recursos humanos locales. La inflación en dólares que sufre Argentina prevalece sobre el buen inglés de los argentinos. Otro mito cae. ¿Pero cuáles fueron entonces las verdaderas causas del ruido ensordecedor de tantas persianas que se están bajando simultáneamente?
Un estudio de la Agrupación de Centros de Atención al Cliente de la Cámara Argentina de Comercio, publicados por iProfesional.com indica que desde 2008 se perdieron 15.000 puestos de trabajo, pasándose de 75.000 a 60.000. Únicamente la exportación perdió 18.000. De los 60.000 empleados que quedan, sólo 2.000 están vinculados a servicios al exterior, destaco Mario Micelli, gerente de la cámara.
Para el consultor Enrique Carrier, si bien es cierto que los problemas económicos de los países más demandantes de estos servicios hayan impactado, “no parece ser una razón de peso”. Y argumenta que las operaciones que se reducen o eliminan en el país están migrando hacia otros de la región (como Chile, Perú, Colombia, entre otros). “O sea, el negocio sigue estando. Quizás sí reducido por la crisis, pero la avidez por menores costos a prestaciones similares seguirá vigente. El tema es que perdimos atractivo”, razona, y concluye que sí tiene lógica ver a los costes como principal motivo de la debacle.
Al momento de ahondar en la forma en que se está concretando la retirada de los call centers, Micelli comenta que "Teletech cerró sus operaciones en Rosario, y una compañía de India se retiró del país con la consiguiente pérdida de 1.000 empleos, por mencionar algunos casos".
A esto, Carrier explica que la industria de los call centers tiene la particularidad de generar rápidamente y con inversiones relativamente bajas una gran cantidad de puestos de trabajo. No son muchos los rubros, sigue, donde una sola empresa puede generar 1.000 puestos en pocos meses. “A esto hay que sumarle que la mayor parte de la demanda de trabajadores es satisfecha por jóvenes, para quienes en muchos casos esta es su primera experiencia laboral formal”, afirma.
“No obstante, continúa Carrier, y a pesar de estos beneficios, se trata de un sector que nunca gozó del estímulo por parte del Estado Nacional, aunque sí por parte de aquellos provinciales o hasta municipales. Claro que en estos últimos niveles, el margen de maniobra es sustancialmente menor. Uno de los grandes misterios de la historia será porqué los call centers fueron suprimidos del borrador de la primera ley de software, lo que hubiera significado que los centros de atención así como otras actividades que conforman los ITES (Information Technology Enabled Services) gozaran de similares beneficios que la industria del software, que genera menos puestos de trabajo y de más alta calificación”.