El comunicado realizado ayer por RIM sobre su “programa de optimización de costes” corrió como la pólvora. El fabricante canadiense ponía cifra a los despidos que anunció e inició hace un mes con cuentagotas. Sumarán 2.000 (el 11% de la plantilla), y se concentrarán en Norteamérica y algún mercado puntual. El comunicado viene acompañado de una reestructuración de la cúpula directiva de la compañía. La razón que dan es centrarse en “en eliminar redundancias y reasignar recursos para centrarse en los segmentos con mayores oportunidades de crecimiento, para alinerase con los objetivos estratégicos de RIM. La reducción de la fuerza de trabajo es un paso prudente y necesario para lograr el éxito a largo plazo, y sigue a un largo período de rápido crecimiento dentro de la empresa, en el que casi se ha cuadruplicado la plantilla en los últimos cinco años”.
RIM anunció resultados en su primer trimestre fiscal (marzo, abril y mayo) de 2011, con un crecimiento de ingresos del 16% en todo el mundo sobre el mismo periodo del año anterior, hasta los 4.900 millones de $, pero menores que el trimestre anterior. Su lastre es el mercado estadounidense, dominado, cada vez más, por unos imparables Apple (con iPhone y iPad) y Google (con su sistema operativo Android instalado por casi todos los fabricantes). Por ello, el valor de RIM mantiene una pronunciada caída en bolsa. El mercado está castigando los retrasos de RIM en adaptar su plataforma QNX, desarrollada para su tableta Playbook, a sus smartphones para competir con Apple y Google.
La situación de RIM en el mercado español es distinta. El fabricante ha tenido la sabiduría de popularizar su potente servicio de mensajería gratuito, Blackberry Messenger (BBM) entre los más jóvenes. A las acusaciones de que regalar mensajes a los jóvenes es irse a un mercado sin poder adquisitivo, un portavoz de Blackberry España asegura que “queremos vender una solución que funcione bien, y cuando los jóvenes se acostumbre a un sistema robusto y seguro, como el de Blackberry, querrán mantenerlo cuando en el mundo laboral”. Las ventas españolas de su primer trimestre fiscal de 2011 crecieron un 162% sobre el mismo periodo de 2010, mientras que todo el mercado de los smartphones creción un 56%.