La financiación es el principal escollo que enfrentan las startups en España, un país que mantiene en el paro a más de 3 millones de personas pero que dificulta la creación de empresas por una serie de condiciones previas, como su desastrosa legislación sobre trabajadores autónomos.
En España, quien ose crear una empresa debe comenzar pagando una media de 300 euros mensuales desde el primer momento: la cotización a la Seguridad Social como trabajador autónomo. De nada sirve que utilice sus ahorros para arrancar el negocio, que simplemente se base en su fuerza de trabajo o que cuente con un más que limitado presupuesto arañado de familiares, amigos y bancos: toca pagar sí o sí. Es una de las peculiaridades del sistema español y una constante en los programas electorales de todos los partidos, por suponer un evidente freno al emprendimiento. Pero la realidad es que los avances apenas son maquillaje y no toca la cuestión de fondo: se debería pagar cuando las condiciones del negocio así lo permitan, o al menos pagar una cantidad razonable para quien está empezando y no cuenta con ingresos sólidos.
Ahora, el Ministerio de Economía y Empresa, a través de la Secretaría de Estado para el Avance Digital, busca crear un marco legal que facilite el emprendimiento flexibilizando las actuales normativas para permitir la proliferación de pequeñas empresas y su posterior crecimiento. Es la llamada Ley de Fomento del Ecosistema de Startups, que en parte corre peligro por la paralización de la actividad legislativa previa y posterior a las Elecciones generales del próximo 28 de abril.
A pesar de ello, el Club Excelencia en Gestión ha solicitado a un grupo de sus socios su opinión sobre las medidas que debería incluir la Ley, prestando especial atención a la delimitación conceptual de startup o al papel de los business angels, una figura de muy escaso peso en España pero muy popular en Estados Unidos, y que aporta flexibilidad en la financiación.
Cómo mejorar el emprendimiento en España
Entre las recomendaciones aportadas están la necesidad de delimitar el concepto de 'start-up', que los expertos consultados definen como "una empresa de nueva creación e innovadora que presenta un potencial de crecimiento o desarrollo y, en ocasiones, un modelo de negocio escalable". Incluso coinciden en que "su modelo de negocio hace uso de tecnologías digitales".
Los expertos del Club Excelencia en Gestión también creen que "no debería haber ningún tipo de regulación financiera ni técnica para los business angels", al tratarse de "una transacción privada entre inversores y start-ups" que cumple "con la legislación vigente en materia de movimiento de capitales e impuestos".
Además, los expertos coinciden en que la burocracia y los impuestos son las principales barreras para emprender en España.
Por todo ello, los expertos han realizado 5 propuestas para mejorar el emprendimiento:
- Incentivos fiscales a las actividades de I+D+i y a las inversiones y financiación de
- Incentivos en materia laboral, de Seguridad Social, y apoyo a la captación y fidelización del talento.
- Simplificación de cargas administrativas.
- Apoyo para la implantación de modelos de gestión reconocidos internacionalmente que permitan a la Startup crecer de forma sostenible.
- Incentivos a las grandes empresas para integrar la actividad de la Startup en su cadena de producción de bienes y servicios.
El Club Excelencia en Gestión, fundado en 1991, es una asociación empresarial con más de 240 socios dedicada a mejorar la gestión y los resultados corporativos. Tiene como objetivo contribuir a la transformación de las organizaciones a través de una gestión excelente, innovadora y sostenible.