Google Home llega a España pero ¿qué puede hacer?

Google Home ya está en España. Es el primero de los altavoces inteligentes a la venta en el país, adelantándose a Amazon Echo (que ha sido anunciado para este mismo año) y al HomePod de Apple, sin fecha de llegada. Que Google sea la primera en llegar se debe básicamente a un factor: el idioma. Su 'Assistant' hace tiempo que funciona en español, por lo que la llegada del altavoz era cuestión de tiempo, al tener la mayor parte del camino ya recorrido.

Google Home se podrá comprar en España en dos versiones, la normal (149 euros) y la mini (59 euros). La diferencia, además del tamaño del dispositivo, radica en la cantidad de micrófonos, las opciones de conectividad o la ausencia de botones. Pero las acciones que puede realizar Google Home son las mismas en ambos casos. A saber, desde poner una alarma hasta realizar búsquedas en Internet, interactuar con otros dispositivos del hogar o pedir que nos lean las noticias. El funcionamiento de Google Home es el mismo que el de Google Assistant en un móvil: basta decir "OK Google" para activarlo y después pedir cualquier cosa que se nos ocurra. Menos comprar, algo que sí hace Amazon Echo por razones evidentes.

Qué puede hacer Google Home

Probablemente más de uno observará con escepticismo dispositivos como Google Home o Amazon Echo. ¿Para qué iban a querer y, sobre todo, a necesitar uno? La respuesta no es sencilla porque son aparatos adelantados a su tiempo. A día de hoy no pasan prácticamente de una curiosidad que permite pedir a Google Home que reproduzca una canción en Spotify o una película de Netflix. Una forma de vagancia que muchos no pensarán que merezca los 149 euros que cuesta el dispositivo, sin contar con la suscripción a estos servicios o el hecho de que también sea necesario un Chromecast conectado al televisor para que la comunicación entre dispositivos pueda existir.

Sin embargo, Google Home es mucho más que un altavoz inteligente para vagos o frikis: es el primer paso, la primera piedra, de los hogares domóticos. En no mucho tiempo podrá subir y bajar persianas, bloquear una cerradura, apagar y encender luces o informarnos en tiempo real sobre datos de importancia para nuestro hogar como ahora hace con el tiempo o los atascos. De nuevo, será necesario que estos dispositivos sean inteligentes y compatibles con Google Home. Hay más de un millar de productos de 150 fabricantes que son compatibles con Google Home, por lo que probablemente no tendremos ningún problema. Y es que nadie quiere quedarse fuera.

Entre las acciones que puede realizar Google Home figuran desde entretenernos con un chiste hasta proporcionar información deportiva o económica, informarnos sobre asuntos relacionados con nuestra agenda (nos puede hacer un resumen mañanero de lo que tendremos que hacer ese día) o contarnos cualquier cosa que le hayamos pedido que busque en Internet. También puede hacer conversiones de moneda (o de peso, distancia...), explicarnos el significado de una palabra o traducir lo que le pidamos. Todo ello sin tocar un solo botón y sin pantalla de por medio: a viva voz y sin levantarnos del sofá, ya que sus micrófonos cubren toda la habitación. Ni siquiera tendremos que gritar para llamar a un familiar que se encuentra en otra parte de la casa: si tenemos más de un dispositivo de Google Home, podrán comunicarse entre ellos y nosotros hablaremos a través del altavoz.

¿Para qué sirve un altavoz inteligente?

La idea de Google Home y de otros altavoces inteligentes es que se conviertan en lo que ya son, un asistente virtual integrado en un altavoz. El dispositivo actúa como un hub que centraliza la comunicación con otros aparatos. En el caso de Google Home, quienes tenga un smartphone Android y sean habituales usuarios de los servicios de Google, seguramente notarán cómo pueden sacar partido al dispositivo. El caso de Amazon es un tanto diferente, ya que sus móviles no han triunfado en el mercado, pero la potencia de Alexa ha llevado a su Echo a 30 millones de hogares solo en Estados Unidos, frente a los 10 millones que se han decantado por Google Home.

Podríamos decir que un altavoz inteligente sirve para centralizar la comunicación por voz con otros dispositivos electrónicos y, sobre todo, para utilizar los asistentes virtuales que están desarrollando la mayoría de las tecnológicas. Estos asistentes se basan en Inteligencia Artificial y aprenden de su propia experiencia, por lo que se adaptan a las necesidades de cada usuario. El objetivo final es que formen parte de nuestras vidas y nos faciliten algunas tareas. En otros casos, como el del español 'Sherpa', sus funciones irán aún más lejos y podrán contestar a correos electrónicos por nosotros, realizar una reserva en un restaurante sin que tengamos que llamar nosotros o proporcionarnos información de interés mientras conducimos, caminamos por la calle o, simplemente, nos encontramos en casa disfrutando de una película. Algunos ya lo comparan con una forma moderna de esclavitud. Otros solo ven un futuro repleto de posibilidades gracias a la Inteligencia Artificial. Cuestión de percepción para una realidad que ha llegado para quedarse y que todos terminaremos teniendo una vez hayamos solucionado la gran duda, ¿qué asistente virtual comprar?