Internet, y especialmente las redes sociales, han ayudado a democratizar el acceso a la información. Sin embargo, reunir noticias de diversa índole en una misma plataforma también ha contribuido a generar confusión. La consecuencia para los usuarios que se ven sometidos a este bombardeo de noticias es que sienten que cada vez están peor informados.
NevaLabs es un proyecto de los responsables de Storyful, la primera agencia de noticias de medios sociales, que nace con la intención de restaurar la confianza en las noticias. La aplicación actúa como un asistente personal que, a través de la personalización y la Inteligencia Artificial, permite disfrutar de la mejor experiencia informativa.
La compañía pretende permitir que el usuario tome el control de su entorno digital y de los filtros que dan forma a las noticias y hacer que se visibilicen las noticias más relevantes. Pero el sistema va mucho más allá. Mark Little, responsable de la herramienta, ha asegurado que la máquina no solo aprenderá a partir del contenido en el que el usuario hace clic, sino que además tendrá la capacidad de comprender cuáles son los temas que coinciden con su identidad y llegará a anticiparlos.
Little habla de una “personalización orientada a los objetivos”, en la que se produce una retroalimentación entre el ser humano y la máquina. Los filtros han sido diseñados para ajustarse a los hábitos diarios de los usuarios, teniendo en cuenta tanto la hora del día como su posible estado de ánimo. Para evitar que se produzca el temido “filtro burbuja”, el sistema está diseñado para que otros usuarios compartan noticias útiles y sea posible descubrir diferentes perspectivas de un tema o nuevas ideas de manera accidental. Por su parte, la Inteligencia Artificial servirá para simplificar la jerarquía de opciones al alcance del usuario.
Los desarrolladores rechazan la analogía con Netflix o Spotify y confirman que la herramienta se ha inspirado en Instagram y las aplicaciones de “mindfulness” (atención plena). La investigación que han llevado a cabo demostró que las aplicaciones que más gustan a la gente son aquellas en las que pasan poco tiempo, pero de calidad. Por lo tanto, su sistema persigue ofrecer el mayor valor en el menor tiempo posible, sacando el máximo rendimiento a la atención. Su filosofía choca frontalmente con la de una red social como Facebook, cuya plataforma está diseñada para retener al usuario en la plataforma.
Aunque Little reconoce que los jóvenes están cada vez más predispuestos a pagar por ver películas o escuchar música, la diferencia con las noticias es que no tienen la misma vida útil y juegan un papel diferente en la vida de las personas. También apunta que "no deben desagregarse de la autoridad de su fuente original".