El fundador de Kik piensa que el desarrollo de los chatbots permitirá que disminuya el uso de las aplicaciones para móviles, que requieren saber utilizarlas antes de disfrutar de sus servicios.
"Los consumidores están cansados de las apps". Con esta frase resumió Ted Livingston, fundador de la aplicación de mensajería Kik, el escenario que llegará a los móviles en los próximos años. Durante su participación en el Mobile World Congress de Barcelona resaltó algo que los usuarios ya tenemos asumido, pero que en realidad frena el propio avance de algunos servicios: desde que quieres hacer algo con tu móvil hasta que realmente lo haces hay un proceso. Comienza con la apertura de una app, la tienda de aplicaciones en la que buscarás y descargarás lo que deseas. Después comenzará un breve proceso de aprendizaje, ya que cada app es un mundo. De ahí el éxito de Snapchat, uno de los competidores de Livingston por el perfil del público que utilizan estas dos aplicaciones, que se ganó a su público gracias a que su estructura poco intuitiva disuadía a los adultos.
La solución que propone es un chatbot integrado en una aplicación de mensajería. "Con el messenger que ya tienes puedes obtener la app que buscas desde tu cuenta y ya sabes utilizarla porque sabes cómo usar la interfaz de conversación", explicó. Es decir: en lugar de descargar y aprender a utilizar una app para cada servicio el usuario simplemente añadiría opciones a su aplicación de mensajería, capaz de realizar nuevas tareas a través de una conversación con la máquina. No sería necesario buscar comida en la app de turno, bastaría con escribir al chatbot qué queremos cenar hoy... y llegaría al poco tiempo a casa. Una forma de interactuar más natural que en la actualidad.
Livingston asumió que este modelo tardará algún tiempo en llegar, pero subrayó la posición que ya ocupan aplicaciones como Kik para permitir que los chatbots sean una realidad que ayude a que los usuarios tengan lo quieren de forma natural.
Kik es
una polémica app de mensajería al estilo de WhatsApp fundada en 2009 por un grupo de
estudiantes de la Universidad de Waterloo (Canadá). Fue lanzada en noviembre de 2010 y en apenas 15 días tenía un millón de usuarios. En 2013 superó los 100 millones de usuarios. En 2016 ya tenía
más de 275 millones de usuarios, en su mayoría adolescentes y jóvenes.