Los tres debates sobre el periodismo sanitario en diferentes tipos de medios (regionales, especializados e internacionales) pusieron en común los retos y las necesidades que tienen los periodistas a la hora de informar: redactores poco especializados, espacios reducidos para las noticias de salud, la inmediatez de la noticia no deja tiempo para profundizar en la información y explicar el contexto, y la falta de acceso a portavoces con cualidades comunicativas, entre los principales requerimientos.
El Presidente de ANIS, @AlipioGutierrez, resumió en una frase la reivindicación general de los profesionales de la información: "La salud, como quinta preocupación de los españoles, no puede estar fuera de los informativos". En este mismo foro, me quedo con otra frase que explica bien el motivo por el que la salud no tiene espacio suficiente en los medios. Javier Tovar, director de @efesalud, comentó: “los que mandan en el periodismo no han hecho temas de salud en su trayectoria” por lo que falta sensibilidad y responsabilidad para informar sobre los temas relacionados con este ámbito.
Y esto me lleva a poner en valor el trabajo que hacemos día a día los compañeros de Cohn & Wolfe. Porque precisamente nuestro reto es el de acompañar a los periodistas en esta “lucha” interna y proporcionarles hechos y datos noticiosos de nuestros clientes, de forma que la salud tenga el lugar que merece en los espacios mediáticos.
Otro tema sobre el que se pudo debatir fue la relación de los periodistas con los gabinetes de comunicación. Durante la sesión, dirigida por periodistas de medios internacionales, se contrastaron las diferentes posturas y puntos de vista de esta relación profesional, tanto en España, como en otros mercados europeos. Este tema, en realidad, daría contenido para organizar otro Congreso completo. Entre los argumentos, se comentó la necesidad que tienen los periodistas de acceder de forma rápida a portavoces de compañías, instituciones, hospitales o autoridades sanitarias para obtener declaraciones de las fuentes oficiales de una noticia. Sin embargo, desde los gabinetes, se defendió que los tiempos y protocolos internos existentes permiten, por un lado, asegurar la cautela y la precaución necesarias antes de anunciar datos o comentarios oficiales; pero, por otro, dificultan esa inmediatez.
Esta diferencia de procesos y tiempos es especialmente relevante en una crisis de comunicación. En Cohn & Wolfe somos expertos en manejar este tipo de situaciones de forma que los portavoces actúen según los protocolos internos pero, su vez, respondan a lo que necesitan los periodistas, adaptándose a la realidad informativa. Aquí es muy importante conocer la fórmula adecuada entre: inmediatez y fiabilidad.
Casos como la crisis por el primer contagio de Ébola en España, que ya analizamos en el post “La buena salud en medio de una epidemia” es un ejemplo de mala gestión a nivel comunicativo. Cuando el Ministerio de Sanidad aún no había confirmado en qué hospital estaba la paciente, los periodistas ya sabían por otras fuentes dónde estaba ingresada. Esto puede parecer un dato sin importancia, pero evitar este tipo de desfases resulta clave para controlar una crisis. Por ello, es importante que los portavoces ‘den la cara’ aunque sea para decir que están confirmando las cifras, antes que no decir nada, y que la noticia vuele con los datos de otras fuentes que, en ocasiones, pueden ser incorrectos. Esto, a lo único a lo que nos lleva, es a la desinformación. Hay que recordar que los periodistas, aunque contrasten diversas fuentes con distintos perfiles, siempre querrán incluir la versión oficial en su noticia. Si no la consigue, la buscará en otro portavoz.
Otra sesión muy interesante fue la medicina personalizada y Big Data. Me quedo con una pregunta que me dio que pensar: ¿darías todos tus datos personales en el mundo físico a cualquiera? Ya lo estamos haciendo en el mundo digital. Compartimos información privada sin límites: cuando compramos online facilitamos nuestros datos bancarios, cuando es nuestro cumpleaños, o estamos contentos, lo compartimos en nuestras redes sociales... Este vídeo es un buen ejemplo.
Tomar medidas de seguridad para proteger los datos es muy importante en el ámbito de la salud. Afecta directamente a los Hospitales, por ejemplo, que deben asegurar la privacidad de las historias clínicas de sus pacientes. Ya existen Hackers de Hospitales, auténticos ciberdelincuentes que han provocado que la ciberseguridad ocupe el segundo puesto entre los retos tecnológicos de la Sanidad en 2016, como publica el informe ‘Top 10 Hospital C-Suite Watch List 2016’, del instituto ECRI.
El emprendimiento y la creatividad también tuvieron su sitio en el Congreso ANIS 2016, donde se presentaron algunos proyectos pioneros o innovaciones tecnológicas que aportan soluciones a los sistemas de salud, a los especialistas y a los pacientes. Como la App Nefrodiet, un proyecto iniciado por un paciente renal que ha contado con el apoyo de la Fundación Renal Iñigo Álvaro de Toledo para terminar de ver la luz. La aplicación para dispositivos móviles facilita a los enfermos renales un seguimiento de su dieta, para que sea rica y variada dentro de los límites que requiere su enfermedad.
En Galicia también hubo espacio para la presentación de proyectos pioneros en el ámbito de la cultura y la salud, como la serie de cinco documentales que ha puesto en marcha la asociación de pacientes Psoriasis en Red y que se ha presentado en el Festival Internacional de Cortometrajes y Arte sobre Enfermedades (FICAE), para mostrar el día a día de las personas con psoriasis. Este proyecto me recordó el post “El cine como séptimo arte para educar en salud” donde defendía este tipo de proyectos.
Para terminar, me gustaría trasladar la enhorabuena también al periodista Emilio de Benito que recibió elPremio ANIS a la mejor labor de comunicación en salud. Merecido premio por su trayectoria en la sección de salud del diario El País.
El Congreso ha sido una experiencia estupenda. ¡Repetiremos en 2017!