La noticia ha pillado por sorpresa a todo el mundo. El anuncio de Google de un cambio de nombre ha corrido como la pólvora en la prensa y las redes sociales, que tendrán que empezar a familiarizarse desde hoy con la nueva empresa, Alphabet, y con la url http://abc.xyz.
En una entrada en su blog, los fundadores Larry Page y Sergey Brin anunciaron de forma inesperada que Google iba a sufrir una reorganización radical de su estructura y gestión corporativa.
El cambio se materializa con la creación de una nueva compañía, Alphabet, formada por “una colección de empresas, la mayor de las cuales, por supuesto, es Google”. Larry Page como CEO y Sergey Brin como presidente asignarán capital y trabajo a cada negocio dirigido a su vez por un líder fuerte que ayude a desarrollar una marca totalmente independiente. En el caso de Google, el elegido ha sido el actual vicepresidente Sundar Pichai.
Google englobará el buscador, los mapas, la publicidad, las aplicaciones, YouTube y Android. Pero otros proyectos como Google Capital, Google Ventures, Calico, Nest, Life Science, Fiber, Wing o Google X serán desvinculados de Google y gestionados bajo el paraguas de Alphabet. Un nombre elegido “porque simboliza una colección de letras que representan el lenguaje, una de las innovaciones más importantes de la humanidad, y es el núcleo de la forma en que indexamos con Google Search!”. Pero además es un juego de palabras. “Alpha-bet”, apuesta alpha, es como se denominan en inglés las inversiones cuyo retorno está por encima de los objetivos.
Un negocio por cada letra del abecedario. Y una forma de que los inversionistas evalúen la actividad de la empresa con mayor claridad y comprendan mejor en qué se está gastando su dinero. Porque Alphabet Inc. reemplazará a Google Inc. como entidad que cotiza en bolsa. Cada acción de Google se convertirá automáticamente en su correspondiente de Alphabet y estará sujeta a los mismos derechos, requisitos y restricciones que la anterior.