La publicidad en televisión pide a gritos un cambio de paradigma y Google está dispuesto a llevarlo a cabo. El gigante estadounidense ha comenzado a realizar seguimientos de anuncios publicitarios que se emiten por televisión en Kansas, donde está disponible su servicio de Internet y televisión Google Fiber.
Google pretende conocer los intereses de los telespectadores y redirigirles solo aquella publicidad que pueda interesarles. Para conseguirlo, la compañía registrará todos los programas y anuncios que consumen los usuarios, del mismo modo que ocurre en la red con AdSense.
Los anunciantes locales solo pagarían por aquellos anuncios que hayan sido vistos y a un precio mucho menor que en las cadenas tradicionales. Además, la marca puede decidir el número de veces que se muestra cada anuncio y orientar sus campañas a los usuarios de determinadas áreas geográficas, que recibirán la publicidad en tiempo real.