La longitud idónea para el nombre de un dominio: Es de 8 caracteres. Es corto, fácil de recordar y de deletrear. Mejor si no lleva números ni guiones y con una extensión ".com".
La extensión que se recomienda para un titular: Son 6 palabras. KISSmetrics asegura que tenemos tendencia a absorber solo las 3 primeras palabras y las 3 últimas, con lo cual, con 6 lograríamos que el lector lea el titular completo.
La duración ideal de un tweet: Es de 100 caracteres. Ése es el punto dulce de compromiso. Investigaciones de Buddy Media y Track Social concluyen que los tweets que no superan los 100 caracteres obtienen, por ejemplo, una tasa de compromiso superior al 17%.
La longitud perfecta para un post en Facebook: No debería superar los 40 caracteres. Jeff Bullas asegura que los mensajes ultracortos obtuvieron un porcentaje de compromiso un 86% más alto que el resto (teniendo en cuenta los “me gusta” y los comentarios).
La extensión ideal de un titular en Google+: Sería inferior a los 60 caracteres. Según Demian Farnworth, de CopyBlogger, ése es el punto en el que se maximizaría la legibilidad y la apariencia de cualquier post (se mantiene el titular en una única línea).
La duración óptima de una entrada en un blog: 1.600 palabras, 7 minutos de lectura, si se mide la atención y no los clics. La longitud por línea más recomendable oscilaría entre los 40 y 55 caracteres (de 8 a 11 palabras).
La extensión perfecta del asunto de un email: Entre 28 y 39 caracteres, aunque no es tan relevante, según MailChimp. La regla general es que no supere los 50 caracteres.
Otras longitudes a tener en cuenta son: 3 minutos para un vídeo de YouTube, 18 minutos para un seminario y 22 mintuos para un podcast.