Scott Jovane justifica la destitución de Pedro J. por motivos económicos: "Si no eres rentable y pierdes ejemplares, debes dejar paso a otra persona". "Un director tiene que comprender que junto a las múltiples cosas que tiene que gestionar, tiene que tener en cuenta el equilibrio económico como parte de la toma de decisiones. Porque vivimos en tiempos duros. Para nosotros, perder lectores es algo muy relevante que no podemos hacer. Esa es exactamente la razón".
Estas declaraciones no han sentado nada bien a Pedro J, quien ha recordado en su Twitter que el periódico que él dirigía hasta el 29 de enero fue el que mejor se comportó en los quioscos el año pasado. En un indirecto cruce de acusaciones, Pedro J. se ha despachado en una entrevista en Il Corriere della Sera (periódico de RCS) afirmando que el grupo italiano tomó la decisión de su destitución sin preguntar a los accionistas y ha vuelto a culpar a las presiones que ejerció el Gobierno de Mariano Rajoy de su cese. En su entrevista con el diario italiano, Pedro J., recuerda los ataques directos de Rajoy en las Cortes y de Cospedal en sede judicial, así como el desplante del Gobierno en pleno a los Premios Periodísticos de El Mundo. "La concatenación de tres indicios hace una prueba, así como la caída de la publicidad", subraya. Y para el exdirector esta caída también tiene culpables. "Todos lo sabemos. Los grupos empresariales españoles más grandes, los que pertenecen al Ibex 35 de la Bolsa de Madrid".
Pero al igual que el presidente ejecutivo de Unidad Editorial, Antonio Fernández Galiano, el CEO de RCS ha quitado hierro a supuestas presiones políticas y ha puesto el acento en la pérdida de lectores. La defenestración de Ramírez de la dirección de El Mundo fue una combinación de factores en la que las presiones políticas representaron un factor, quizás minoritario, pero que ha suscitado una polémica que el mismo ex director ha contribuido a animar. Pero los números rojos de El Mundo y de Unidad Editorial son evidentes y han sido en los últimos meses un auténtico quebradero de cabeza para sus propietarios italianos, que el año pasado tuvieron que poner en marcha una dolorosa ampliación de capital para mantener a flote su filial española.
En total, la difusión de El Mundo entre enero y noviembre del año pasado cayó un 15% frente al 11% que bajaron de media sus competidores, con un importante caída desde el verano cuando estallaron las exclusivas del diario de Pedro J. sobre el Caso Bárcenas. Los datos de la OJD reflejan que en julio El Mundo –cuando estalla el caso de los SMS entre Bárcenas y Rajoy- registró unas ventas de 131.000 ejemplares y una difusión de 170.000. Luego ambas cifras se fueron reduciendo hasta llegar a los 110.000 ejemplares de ventas y de 150.000 en difusión en diciembre. El desplome de El Mundo ha sido superior a la media del mercado y esta dinámica sustenta la justificación del consejero delegado de RCS sobre la falta de rentabilidad de la gestión Pedro J.
"Transición necesaria" y recortes
Además Scott Jovane se muestra convencido de que la salida de Pedro J ha sido una buena decisión para el futuro del grupo. "Durante estos 25 años la gente veía en un periódico, El Mundo, a El Mundo de Pedro J. Todo tiene que sobrevivirme a mí, a usted o a Pedro J. Era necesaria una transición y además, la hemos hecho poniendo al frente a su número dos", ha apuntado. El consejero delegado de RCS, que llegó con urgencia a Madrid el 29 de enero para gestionar el cambio en la dirección de El Mundo, reafirma su confianza en el sustituto de Pedro J.: "Casimiro va a ser capaz de romper con el pasado y restablecer la rentabilidad y volver a conectar con ciertos lectores que habíamos perdido".
Esta insólita entrevista al periódico de la competencia ha sorprendido al propio exdirector de El Mundo, que ha reproducido un tuit del periodista Felipe Sahagún: "Ya sólo falta que el consejero delegado de El País explique en El Mundo el futuro de Prisa".
Sobre los rumores que apuntan a la posible venta de algunas de las cabeceras del grupo, Scott Jovane ha afirmado que "no creo que lo necesitemos. Creo que Marca y Expansión aportan un gran valor a RCS y la forma en que operan como un sistema",aunque por otro lado reconoce que el precio que RCS pagó por el grupo Recoletos en 2007 (1.100 millones de euros) fue "quizá demasiado alto". Y sobre posibles fusiones con otros medios, asegura que "es muy difícil mezclar cabeceras por una cuestión de contenidos. La posibilidad que Scott Jovane contempla se limita al nivel industrial; "Lo que el sector sí puede compartir para ser más eficiente son las instalaciones de imprenta, la distribución, e incluso la parte comercial".
Preguntado por posibles despidos en Unidad Editorial, el consejero delegado de RCS explica que tendrán que ajustarse "en función de cómo evolucione el mercado". "Cualquier cabecera puede ser de calidad, independiente y respetada si es capaz de ser independiente económicamente. Creo que en los últimos trimestres estamos en ese camino, lo que me hace sentir bien, pero si el mercado no despega...", afirma dejando caer la hipótesis de nuevos recortes para reducir la carga financiera que supone Unidad Editorial para el grupo italiano.
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