De las conclusiones de este informe elaborado por la European Public Relations Education and Research Association, a través de 2.710 encuestas a profesionales de 54 países diferentes, se pueden extraer los cinco grandes retos a los que deben enfrentarse los responsable de comunicación de las organizaciones.
Alinear las estrategias de comunicación con el negocio. Según el estudio, poner en común dichos aspectos debe ser la principal meta. En este punto, y aunque la relevancia e influencia de los departamentos de comunicación ha aumentado en opinión del 87% de los encuestados, también se detecta la necesidad de dar más peso a la comunicación en la estrategia global, implicando a los principales ejecutivos directamente en las estrategias de comunicación.
Detectar nuevos influenciadores y diferenciar públicos. La mayoría de los dircom considera importante el papel de los nuevos grupos de interés, blogeros y gestores de comunidades online (51,4%), consumidores que hablan en redes sociales (53,2%) y empleados activos en los social media (58,1%). Pese a ello, sólo el 37,7% de las organizaciones desarrolla estrategias específicas.
Además, según el informe, es necesario encaminar las acciones no sólo a los públicos tradicionales sino también a los nativos digitales, estableciendo acciones y canales capaces de alcanzar a los distintos grupos de edad. El 60% de las organizaciones implementan estrategias de comunicación para llegar a diferentes generaciones.
La adaptación al mundo digital. Pese a detectarse un incremento de lashabilidades en la utilización y el seguimiento de tendencias de los social media. De momento, la cifra de profesionales con altas capacidades digitales sólo ronda el 50%.
Internalización. El estudio releva que la mayoría de los dircom dan un enfoque internacional a sus planes, pero recalca la necesidad de potenciar este aspecto. En un mundo globalizado las empresas deben saber adaptarse a las diferencias locales, culturales y políticas para realizar una gestión adecuada de la comunicación. No obstante, ni el 50 % cuenta con las estructuras necesarias para llevar a cabo dicho enfoque.
Consolidación del estatus profesional. Pese a la importancia adquirida por las áreas de comunicación en momentos de crisis –el 70% de los profesionales aseguran haber gestionado temas de comunicación de crisis ya sea institucional, de gestión o de liderazgo– la profesión cuenta con menos prestigio que otros puestos y sigue enfrentándose al desafío de demostrar su utilidad. Prueba de ello es el descenso en los presupuestos de los departamentos de comunicación, que sólo en un 14,8% de las organizaciones ha logrado más recursos económicos.