“Es muy importante que Europa trabaje de forma unificada frente a otros países, España lo apoya y recabo el apoyo de todo el sector y de los ciudadanos para hacerlo. Queremos trasladar a todos la sensación de urgencia para apoyar la revolución que las nuevas tecnologías suponen”, ha puntualizado Víctor Calvo-Sotelo, Secretario de Estado de Telecomunicaciones y para la Sociedad de la Información del Ministerio de Industria. En su discurso ha resaltado los avances en el despliegue 4G, el trabajo realizado para aprobar la Agenda Digital española (en el curso se ha recordado el incumplimiento de algunos puntos), y la dinamicidad demostrada por el sector en el encuentro (lo hace todos los años).
Europa ha estado presente a lo largo del encuentro. El ministro lo abría, hablando de la necesidad de ganar competitividad frente a Asia y Estados Unidos “nuestros principales competidores”. La necesidad de reducir el número de operadores europeos y realizar un marco único legislativo ha sido recordada a lo largo de todo el encuentro. Es imprescindible para optimizar las inversiones y competir con los gigantes europeos y asiáticos. Las telecomunicaciones europeas están perdiendo competitividad en el mundo no solo por la fragmentación del mercado. Siemens es apenas el único fabricante del sector que queda. El otrora gigante Ericsson, también en el mundo de los móviles, se ha quedado reducido a realizar equipos para redes, tras la compra de Sony de su división de móviles. El camino de Nokia es el mismo.
Ignacio Pérez Dolset, co-presidente de Grupo ZED, hablaba en la misma línea en la mesa redonda de contenidos digitales del miércoles por la tarde. “Hay que ser un líder internacional para competir porque las industrias mundiales están en manos de dos o tres empresas. El 97% de la industria mundial del cine, por ejemplo, está en Estados Unidos, y si ellos no te distribuyen una película no la estrenas en el mundo. Espero que no llegue un día en que para vender un libro no tengas que ir a Estados Unidos”, decía. Todos los componentes de la mesa pidieron un marco regulatorio estable europeo favorable a la inversión en contenidos digitales, se lleva haciendo desde hace años.
La novedad de este encuentro ha sido superar el discurso español con el europeo. El reconocimiento de las autoridades españolas y de los grandes operadores de consolidar el sector y la normativa en Europa ha sido unánime. Por algo se empieza.