Esta nueva tecnología es un desarrollo de software, denominado Ubi software, que se ganó el apoyo de Microsoft. Ubi fue elegida como una de las once empresas más prometedoras del mundo participando en Microsoft Accelerator for Kinnect el año pasado.
El sistema desarrollado es capaz de convertir cualquier superficie en una pantalla táctil. Para ello solo es necesario conectar un proyector y el dispositivo Kinnect de Microsoft para Windows a un ordenador que tenga instalado un sistema operativo de la compañía. La pantalla no exige que se realice un proceso de calibración, ya que la aplicación es la encargada de ajustar los detalles. Una vez que se realice la proyección en la pantalla elegida, el usuario puede interactuar con ella de manera táctil.
Este nuevo producto ha se empieza a comercializar en cuatro versiones: Basic, Professional, Business e Enterprise. La diferencia entre ellas radica en el número de puntos táctiles disponibles en la pantalla (de 1 a 20), en las pulgadas de la proyección (de 45 a 90) y en el soporte técnico. Los precios varían desde los 149 hasta los 1.499 dólares.