De este modo se busca proporcionar una visión pública general a los consumidores. El ministro de economía y consumo asegura que además del modelo de páginas de comparación de gasolineras que funcionan actualmente -gestionado por la Dirección General de Competencia Consumo y Fraude- el Gobierno está tratando de construir un comparador de residencias de tercera edad. La idea que persiguen es mapear las instalaciones dedicadas a las personas mayores para informar sobre sus tasas y servicios.
Los actores responsables de la implementación del sistema son los equipos DGCCRF, Fondo Nacional de Solidaridad para la Autonomía, y la Dirección General de Cohesión Social (CRD), ambos dependientes del Ministerio de Salud.
Para poder informar con rigor el gobierno francés financiará la creación de una web comparativa de precios. Pero en este punto se complica el servicio, ya que, mientras las gasolineras ofrecen el mismo tipo de servicio, los hogares de ancianos no están estandarizados, por lo que no son necesariamente comparables. De ahí la necesidad de definir un intervalo mínimo de servicios.
Pero las ofertas son demasiado grandes y cada institución cuenta con instalaciones y precios muy diferentes. El diario “Le Monde” señala que la plataforma podría estar lista a finales del próximo año. El encargado de este plan de comparación envía alertas a un sistema nacional de información cuando los precios parecen anormales o encuentra diferencias significativas entre las estaciones. Esta herramienta se torna muy útil para regular el mercado de seguros y residencias privadas.