Según Frank Smyth, asesor de seguridad del Comité de protección de Periodistas, los periodistas deben ponerse al día en materia de seguridad digital.
Alan Pearce, colaborador de las revistas “Time”, “The Sunday Times” y “Sky News”, ha escrito un manual para ayudar a los redactores a protegerse del mundo digital, que denomina como “el campo de batalla emergente”. Sus pautas se pueden encontrar a la venta en “Amazon”.
El escritor asegura que es muy fácil ser objetivos de la supervisión del gobierno basado en el historial de búsqueda.
La “Deep Web” es la parte de la red no registrada por motores de búsqueda y ofrece una protección de anonimato a los periodistas. Tores (The Onion Router) es una manera de acceder a esta web “oscura”, que se fue desarrollando con fondos de la marina de guerra estadounidense en la década del 2000. Actualmente cuenta con 400.000 usuarios diarios en comparación con los 2.000 millones de la web “de superficie”. Pero esta intimidad crea un hervidero de delincuencia.
“Deep Web” cuenta con sus propios monitores de búsqueda y Pearce asegura que los periodistas preocupados por la seguridad deben evitar el uso de Google, y, en su lugar, deben optar por servicios como “Secret Search Engine Labs” o “Ixquick”. En cuanto a navegadores asegura que Mozilla Firefox es el más seguro por su facilidad para instalar complementos de protección como “Force HTTPS” y “Stealthy”.
También enumera una serie de redes privadas para complicar la infiltración, así como una serie de softwares fiables (Comodo Personal Firewall, Lavast Ad-Awarey y Spybot Search and Destroy)
Afirma que los aparatos más rastreados son los smartphones, cuyo envío de datos es inseguro según Katrin Verclas, investigador del Instituto Nacional Demócrata. Para hacer este seguimiento más difícil, los usuarios deben apagar el GPS y activar el modo avión en las ocasiones más arriesgadas. Los periodistas en especial deben evitar conectarse a las redes Wi-Fi y asegurarse de guardar sus archivos en una tarjeta SD externa al teléfono.
Además de ello existen algunas aplicaciones como “Secret compartement” para iOS y Android que permite ocultar documentos, “Mobile Secutiry” para Android que borra de manera remota los archivos y “Wickr” para iOS que cifra los datos y se autodestruye tras comprobarlos.
Para evitar los problemas de “malware” (“software maliciosos”) Pearce recomienda algunas aplicaciones de seguridad como “AVG Mobilation” y “Trend Micro” para Android o “Anti-virus y escáner de alware” para iOS. “Lookout” que funciona en ambos sistemas.
Uno de los mayores peligros de seguridad es guardar los archivos en una tienda de la nube. Por ello se destaca “Trend Micro” y “Avast” como dos sitios seguros que no permiten a las agencias estadounidenses acceder a los documentos de los usuarios.
Los emails y las inscripciones deben hacerse a través de un VPN o de Tor, para que se reduzcan sus posibilidades de ser interceptados.
Otra posibilidad es la mensajería Privnote, que autodestruye los mensajes tan enviarlos
Todos estos consejos recogidos en un artículo de “WAN-IFRA” solo acaparan una pequeña parte de la seguridad digital, pero es necesario que los usuarios, y los periodistas en especial, sean conscientes de que las tecnologías evolucionan constantemente.