En un momento en el que los medios están inmersos en el desarrollo de aplicaciones eficientes para móviles y tabletas, dispositivos que se han convertido en los protagonistas del consumo de contenidos, The New York Times va un paso por delante. El medio estadounidense acaba de lanzar una aplicación para las gafas de realidad aumentada de Google.
Aunque parece que no se pondrán a la venta al público hasta el 2014, ya circulan los primeros ejemplares entre desarrolladores y unos pocos afortunados. Por ello diversas compañías, entre ellas Twitter, están trabajando para adaptar sus funcionalidades a las Google Glass, un dispositivo que para muchos marcará un antes y un después en el mundo tecnológico. Por si es así, The New York Times ha querido ser de los primeros en adaptarse a la nueva plataforma con una aplicación que, según Mashable, es capaz de ofrecer alertas con noticias de última hora, actualizaciones de las informaciones y resúmenes de prensa leídos en voz alta.
Pero esta no es la única iniciativa que la empresa editora The New York Times pondrá en marcha para adecuarse a la era digital. Tras un descenso de los beneficios de casi el 93%, por la venta de activos en 2012, y una caída de los ingresos del 2% durante el primer trimestre del año, originada por un descenso de la facturación de la publicidad (un 11,2% menor que en 2012), que no ha podido contrarrestar con las crecientes ganancias por circulación (un 6,5% mayor debido principalmente al incremento de las suscripciones), la compañía ha presentado un plan global que pondrá en marcha a finales de año. La estrategia, como recoge Financial Times, se centrará en tres áreas: incrementar sus productos digitales de pago, unificar la marca a nivel mundial y potenciar los vídeos.
Así, la compañía planteará un sistema de suscripciones con distintos niveles de pago, con un precio más económico para las noticias de más interés y uno más elevado que dé acceso también a eventos y conferencias, así como tarifas por áreas temáticas.
Con el fin de lograr más lectores gracias al prestigio de su marca, cambiará el nombre del International Herald Tribune por el de International New York Times. También aprovechará el valor de la marca para vender otro tipo de productos, expandiéndose hacia el comercio electrónico y los juegos.
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