En solo un año y medio la aplicación de mensajería instantánea Line ha alcanzado los 85 millones de usuarios en todo el mundo. Solo necesitó 399 días para sumar 50 millones, frente a los 1.096 de Twitter y los más de 1.300 de Facebook, las redes sociales de mayor éxito. Un crecimiento sin precedentes, y de momento imparable, que ha comenzado a hacerse significativo en España y en el mercado Latinoamericano. De ahí que la empresa impulsora de esta aplicación, NHN (Next Human Network), haya apostado por presentar oficialmente la aplicación en España, en busca de sus potenciales clientes y de su papel como puerta de entrada en el emergente mercado latinoamericano. Según explicaba a Europa Press June Cha, jefa de negocio de NHN, la empresa espera llegar a la cifra de 100 millones de usuarios gracias a los españoles y los consumidores de países de habla hispana.
Pero, ¿podrá desbancar Line al fenómeno WhatsApp? Lo cierto es que tiene todos los ingredientes, ya que se ha convertido en una plataforma multiservicios que no solo ofrece mensajes gratuitos, sino también llamadas gratis; servicios similares a los de las redes sociales Twitter y Facebook, como timeline o muro de publicaciones; videojuegos; o una comunicación muy visual a base de elaborados emoticonos, sus denominados ‘stickers’ (pegatinas o etiquetas), que se han convertido en uno de sus mayores atractivos. Además, Line se puede usar desde cualquier dispositivo, PC, Mac o smartphone, y está disponible para los principales sistemas operativos móviles: iOS, Android, Windows Phone y BlackBerry.
La aplicación ya no tiene nada que ver con sus orígenes. Line surgió tras el tsunami de Fukushima (Japón), como un servicio de mensajería rápido y una alternativa de comunicación, pensada para no fallar. Poco a poco ha ido sumando nuevas características y servicios que amenazan la hegemonía de WhatsApp, la aplicación líder hasta la fecha con más de 1.500 millones de seguidores a nivel mundial y entorno a 10 en España.