Apple se resiste a incorporar la tecnología NFC, base del monedero móvil adoptado como estándar en todo el mundo, y que comercializan Android, Windows Phone y BlackBerry. La Caixa y BBVA están dando pasos de gigante para implantarlo. Repsol, Caprabo, Mango, Radioteléfono Taxi, Renfe, El Corte Inglés, Carrefour, Repsol, Caprabo, Mango, Mercadona, Fnac, Vips, Zara o Radioteléfono Taxi están en ello. ¿A que espera Apple?
BlackBerry y Samsung han sido pioneros en comercializar smartphones NFC, para pagar desde céntimos hasta 20 o 30 euros con solo arrimar el terminal al TPV (terminal punto de venta). Es el estándar mundial, y hay más de cien modelos de casi una docena de fabricantes en todo el mundo. ABI Research anticipa que 2012 terminará con unos 93 millones de smartphones NFC en el mercado, la mayoría de la plataforma Android de Google. Los móviles NFC son habituales para el pago de los taxis y las compras neoyorquinas, el metro londinense o los transportes suecos. El mundo occidental imita la cómoda forma para realizar micropagos (de céntimos a 20 o 30 euros) que es habitual en Japón y Corea desde hace años. Bancos chinos empiezan a implantar el modelo.
“La curva de adopción de NFC va a ser muy rápida porque es muy cómodo”, asegura Nicolás Moya, director de Innovación de Bankinter. Para pagos elevados se teclea una clave, como sucede con las tarjetas tradicionales, y en los monederos NFC para móviles también se pueden guardar los puntos de fidelización y descuento. En España, La Caixa y BBVA empiezan a incorporarla en los chips de sus tarjetas de pago, y ultiman con las operadoras el modelo de negocio para lanzarlo en los móviles. Ambas entidades trabajan con tiendas, taxis, gasolineras y cadenas de distribución para cambiar los TPV, en los que se puede pagar con los móviles NFC de otros países.
Precisamente el acuerdo que Apple debería hacer con los bancos y operadoras de telecomunicaciones es el mayor freno para su implantación. La manzana se resiste a hacerles partícipes de su ecosistema, que le resulta tan rentable y que no quiere abrir a terceros. “Creo que Apple no ha incluido NFC en el iPhone 5 porque no tiene claro su papel en el ecosistema del pago móvil. Saben que pasarán un par de años hasta que se generalice estar forma de pago. Lo incorporarán cuando encuentren su posición, no perderían el tren”, añade Moya. Mientras tanto, Passbook, la nueva aplicación para iOS6, permite organizar tarjetas de embarque, entradas de espectáculos o recibos. Es un primer paso.