En su blog, Paton intenta explicar las razones de la bancarrota: “La empresa salió de la reestructuración en 2009 con aproximadamente 225 millones de dólares de deuda y con una estructura de costos que incluyen arrendamientos, pensiones de beneficios definidos y otros pasivos que ahora son insostenibles y amenazan los esfuerzos de la compañía para una transformación digital de éxito”. Paton, de hecho, es visto en Estados Unidos como el “Apóstol de los medios de comunicación” por su apuesta firme y radical por lo digital. Journal Register Company controla diarios como “The Register Citizen”, “Oakland Press” o “Daily Freeman”.
Por eso, defiende su labor: “Desde 2009 hasta el 2011, los ingresos digitales crecieron en un 235% y la audiencia digital en más del doble. En lo que va de año, los ingresos digitales han crecido un 32,5% y los gastos a finales de 2012 habrán bajado en un 9,7% respecto a 2009. Hemos invertido en futuro y lo seguiremos haciendo”.
Pese a todo, reconoce que no todo ha ido bien y culpa de ello a la caída del papel. “Los ingresos de Journal Register Company por publicidad impresa disminuyeron en un 19% y los anuncios en papel representan más de la mitad de los ingresos de la compañía. La publicidad impresa se redujo en la industria periodística aproximadamente un 17% durante el mismo período de tiempo, según la Newspaper Association of America. Además, tanto la circulación impresa y los ingresos por circulación también han disminuido en el mismo período de tiempo”, explica.
Paton subraya, en cualquier caso, que la medida no tendrá “ningún impacto” en el funcionamiento diario de Digital First Media, que continuará con su negocio y poniendo en marcha nuevas iniciativas. “Durante el proceso de venta, no habrá ningún cambio en los sueldos, salarios, seguros o reembolso de gastos”, añade Poynter.