"Estamos absolutamente encantados. Empezamos siendo pequeños y hemos crecido rápido", celebró Janine Gibson, directora de la edición estadounidense, quien asegura que la oficina en Nueva York constituye, simplemente, “la progresión natural del periódico”.
“Siempre hemos tenido una audiencia aquí, pero el de ahora es un salto muy importante”, reconoció Gibson, quien asegura que el próximo objetivo de la edición estadounidense de “The Guardian”, al margen de los números, es aumentar la calidad de los contenidos.
“The Guardian” tomó la decisión de crear la edición de EEUU en abril de 2011 debido a que uno de cada tres lectores de la edición digital del diario vivía en Estados Unidos, por lo que decidieron crear equipo comercial exclusivo y separado del que trabaja en Londres.