El kiosco digital se puso en marcha con 20 publicaciones y actualmente reunía más de 100. El precio de su suscripción mensual era de 6,99 dólares, aunque esa cifra se redujo más tarde a 1,99. Su modelo de precios, sin embargo, era confuso, ya que, aunque daba acceso a los contenidos del “USA Today” y del “Washington Post”, solo se podía acceder a las últimas noticias de Reuters, al contenido seleccionado del “Financial Times” y a selecciones del “New York Times”. Si el usuario quería tener acceso a más contenidos, el precio iba aumentando significativamente.
A todo ello se le añade el hecho de que la mayor parte de esos contenidos estaban disponibles de forma gratuita en Internet. Ongo ofrecía esos contenidos pero sin publicidad, basándose en la creencia de que los usuarios valoraban los contenidos libres de anuncios.
“No soporto la publicidad en la noticia ni que alguien quiera venderme una hipoteca mientras leo el periódico”, afirmó Haarman en la presentación del kiosco digital. Ahora, ha reconocido que con Ongo se han aprendido algunas lecciones sobre la actual forma de distribución de noticias y no quiso desvelar el número de suscriptores con el que contaba.