Rick Edmonds, de Poynter, que trabajó en la preparación del proyecto, explica la complejidad que el crecimiento del digital y el cambio hacia “la web primero” provoca en las redacciones. Se da la circunstancia, además, que aunque la parte digital del negocio está creciendo, en términos de ingresos sigue representando una porción muy pequeña comparada con el papel, a pesar de que ese esté en declive. Tras 15 años desde que comenzó la transición al digital, los directivos todavía están intentando averiguar cómo actuar.
Uno de los ejecutivos, que han preferido permanecer en el anonimato, cuenta que aunque ellos se empeñen en cambiar directores, vicepresidentes, subdirectores y otros cargos, al final es la tropa la que se resiste al cambio, y es difícil convencerla.
Cuando la estrategia de la web primero se aplica en periódicos con grandes problemas financieros en sus versiones en papel, es más sencillo realizar el cambio rápidamente. Cuando la versión impresa todavía es fuerte y tiene beneficios, encontrar el equilibrio es sin embargo más difícil, advierte Edmonds. Necesitan tecnólogos, personal de venta cualificado en el digital y liderazgo para conseguir nuevos enfoques e ingresos, pero a la vez, tienen que sacar el máximo provecho del papel y alargar su esperanza de vida.