BBVA Research, antiguo servicio de estudios del banco, y Google realizarán información relevante sobre la economía española de forma conjunta. Los modelos y análisis de predicción económica empleados por BBVA Research se complementarán con la información de las búsquedas por Internet realizadas a través de Google, que son la mayoría, para realizar informes sobre sectores o industrias españolas. El anuncio realizado por ambas empresas asegura que el trabajo conjunto “permitirá reducir en un 25% el error en las previsiones. Los resultados permitirán predecir con mayor exactitud el comportamiento de la actividad en los sectores económicos, lo que ayudará a las empresas a tomar decisiones clave”.
La importancia del acuerdo no es el que los nuevos estudios serán más predictivos que los realizados hasta ahora por cada uno de ellos. Se puede decir que ni siquiera el acuerdo es importante, más allá de redundar en la mejora de la imagen y el prestigio de ambas empresas que, a la postre, es la finalidad de la realización de estos estudios. La importancia de este nuevo paso es la demostración de que la relación de BBVA y Google no es flor de un día.
Lo del segundo banco español y el mayor buscador mundial se ha convertido en un noviazgo en toda regla. ¿Qué vendrá después? Los analistas que se quedaron petrificados ante el acuerdo para subir a la nube low-cost de Google el front office de los 110.000 empleados que el BBVA tiene en 26 países se han dado cuenta de que la cosa va en serio.
Indicadores BBVA-Google de Actividad Económica es ya la rúbrica de los informes que ambas empresas prometen hacer a partir de ahora. “Este proyecto de colaboración nace con la vocación de extenderse a varios países y sectores considerados estratégicos para BBVA y Google”, afirma el informe de presentación de la nueva actividad.
Quienes podían haber dado el soporte al BBVA que ha dado Google cruzan cruzan los dedos. La confirmación del noviazgo del banco y el buscador podría seguir con un nuevo contrato para llevar el hosting del banco, o sea el alojamiento de los servicios y la infomación del core del negocio a grandes ordenadores de Google. Eso serían palabras mayores. No solo porque Google iniciaría una actividad de gran calado, también porque lo haría con uno de los gigantes del IBEX-35, creando un peligroso precedente. Todavía queda camino para ello, antes debe demostrar que realiza el primer encargo del BBVA sin ningún tipo de fallo. Su competencia tendrá tiempo para reaccionar, si todavía puede. La contienda que se avecina traerá, seguro, una dramática rebaja de precios, todavía más, del mercado español de outsourcing.
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