Inadecuada legislación, y un afán de cambiar de operador para recibir un móvil subsidiado están castigando los ingresos de los operadores de móviles en España. De forma pareja aumenta el tráfico en las redes móviles, y la exigencia de invertir en redes que aumenten su velocidad. Vodafone empezará a operar la cuarta generación de red a finales de mes.
Paco Román, presidente de Vodafone España, resaltó los hándicaps del mercado español de telecomunicaciones, que han contribuido a rebajar los resultados de los principales operadores en el pasado ejercicio. De entrada, los ingresos del sector se han comportado mal, de forma pareja a la economía, a pesar del aumento del tráfico de las comunicaciones. Mientras el tráfico de datos se ha multiplicado por 3,3 en dos años, los ingresos por datos solo lo han hecho por 1,4, cayendo los ingresos por línea.
La regulación también penaliza al negocio español, y está provocando caídas de hasta la mitad de los ingresos de las operadoras. La regulación no ha cambiado a pesar de la dureza de la crisis, por lo que Román pidió un marco estable que fomente la inversión.
Suma y sigue. Los gastos de portabilidad penalizan a todas las operadoras, por la afición de los clientes de ir de una a otra para hacerse con nuevos terminales. Los subsidios de la portabilidad (gastos de adquisición y retención de cada cliente) de todos los operadores suman 3.000 millones de euros cada año en España, sangría que no tienen en otros países. De ellos, 1.600 millones se invierten en subsidiar terminales, cifra descomunal teniendo en cuenta que los españoles cambiamos de terminal cada dos años, y la amortización de la inversión en una línea móvil se realiza a los diez años.
El video llena la tercera parte de la navegación móvil, provocando una demanda de ancho de banda que requiere un fuerte esfuerzo inversor. Román denunció que solo unos pocos contribuyen a estas inversiones, y son muchos quienes se benefician de la mejora de las redes. Pidió a todos los agentes del sector su contribución a este esfuerzo inversor.
Despliegue de la red 4G
Para responder al aumento del tráfico de datos, Vodafone España empieza el despliegue de la red 4G, con tecnología LT a finales de este mes. Pondrá en marcha los primeros proyectos piloto en entorno real a clientes seleccionados de Madrid, Barcelona y Málaga. Vodafone España ha probado esta tecnología en el pasado Mobile World Congress en Barcelona, y tiene como referencia la experiencia de Vodafone Alemania, que lanzó LTE a finales de 2010.
La operadora también aumentará el ancho de banda de su red en 1.800 localidades rurales, en las que activará la tecnología 3G el próximo 9 de septiembre. A final de marzo de 2012, la cobertura de banda ancha móvil se extenderá a 3.100 pequeños municipios. Román contó que la auditora independiente P3 Communications ha realizado una auditoría de calidad de servicio móvil. El resultado indica que Vodafone España ofrece “la mejor calidad de conversación para el servicio de voz y el servicio de transferencia de archivos con mayor velocidad para Internet móvil, entre todas las redes móviles GSM/UMTS (redes 2G y 3G) en áreas urbanas en España”.