Empieza la competencia en banda ancha móvil, a velocidades superiores a las redes fijas. El anuncio realizado ayer por Telefónica de iniciar operaciones con su red 4G coincidió con la reestructuración de su organigrama en torno al nuevo mundo digital. Los directivos cambian de puestos.
La noticia dada ayer por Julio Linares, consejero delegado de Telefónica, de aumentar el ancho de banda de su red móvil con la tecnología LTE de cuarta generación fue oficializar la red que tiene en pruebas desde hace casi un año. Lo que cayó como una bomba, por inesperado, fue el comunicado de la CNMV sobre la reestructuración del organigrama de la primera empresa española, y la creación de una división Digital.
Telefónica ha dado su último paso para adaptarse al nuevo entorno global con la creación de Telefónica Digital, una unidad de negocio con sede en Londres y 2.500 empleados, comandada por Mathew Key, hasta ahora al frente de Europa. Telefónica Digital aglutinará los siete negocios verticales, puestos en marcha hace un año por Telefónica para responder a las nuevas demandas (financiero, sanidad, servicios máquina a máquina están entre los de mayor crecimiento)
En la reestructuración, Álvarez Pallete, hasta ahora al frente de Latinoamérica, se hará cargo de Europa y España, el mercado más complicado porque la crisis económica le impide un crecimiento ya vegetativo, dada su madurez. La floreciente Latinoamérica estará bajo el mandato de Fernández Valbuena, hasta ahora al frente del área financiera de la operadora. Es el caramelo de la empresa, sobre todo por Brasil, un país que disparará su crecimiento en los próximos años: Olimpiadas, mundial de fútbol, nueva reunión de los jóvenes católicos y, por encima de todo, el paso de un país tercero a primera división, algo que sus autoridades están haciendo muy bien. En esta reorganización, casi se puede decir que el presidente Alierta y el consejero delegado Linares son los únicos que siguen en sus puestos.
Telefónica está preparada para los nuevos tiempos, y también con su red. La 4G estará disponible para grandes clientes en Madrid y Barcelona, gracias a módems y routers de máxima densidad de datos en la frecuencia de 2,6 GHz. Los datos bajarán a una media de 50 Mhz, con picos de 170 Mhz. Subirán a una media de 25 Mhz con picos de 50 Mhz.