José María Álvarez-Pallete, presidente de Telefónica, hizo balance de los resultados correspondientes al ejercicio 2019 ante la Junta General de Accionistas, celebrada vía telemática, y ha destacado los sólidos fundamentos de la compañía y el papel de referente social que ha desempeñado en los últimos meses, demostrando ser una empresa “solidaria, fiable y preparada para el futuro”. Telefónica ha ayudado a “mantener viva la actividad empresarial, cultural, educativa y laboral de nuestras sociedades. Incluso la propia respuesta sanitaria y administrativa a la emergencia ha descansado sobre nuestras redes”, ha señalado en su discurso.
En este sentido, ha explicado que “si hemos aprendido algo de esta crisis es que las infraestructuras digitales han sido fundamentales. Hemos comprobado que disponer de la red de fibra más potente de Europa no es una anécdota; es algo que se revela esencial en momentos cruciales”. Y ha añadido que “en un momento en el que la sociedad buscaba referencias, las ha encontrado en el personal sanitario, en policías y militares, en la cadena de suministros de alimentos y, desde luego, en las comunicaciones”. Álvarez-Pallete ha subrayado durante su intervención, que “hemos podido estar a la altura gracias a que contamos con redes que han demostrado su robustez y se han comportado con total estabilidad y seguridad. Y por nuestra gente, la gente de Telefónica”.
“Vimos que podíamos ayudar y ayudamos. Sentimos que podíamos hacer más y lo hicimos. Sabemos que la razón de ser de una empresa es servir a toda la comunidad de la que forma parte. Y gracias a la claridad de nuestra misión y a nuestros valores, esta crisis ha sacado lo mejor de Telefónica. Nunca nuestro propósito ha tenido más sentido”, ha enfatizado José María Álvarez-Pallete.
Precisamente por el papel crucial desempeñado por el sector en esta crisis, el presidente de Telefónica ha hecho un llamamiento a la unidad de acción para garantizar que la población tenga acceso a la tecnología e impedir así que se agraven las desigualdades sociales.
Álvarez-Pallete ha incidido en que “favorecer la digitalización del tejido productivo español con tecnologías como Cloud, Ciberseguridad, Big Data e Internet de las Cosas, incrementará su competitividad, estimulando el crecimiento y el empleo. Esto es particularmente relevante en el caso de las PYMEs, por su gran peso en la economía española y su bajo nivel de digitalización. Por ello es tan relevante incluir también en el Pacto Digital el apoyo a estas empresas en su proceso de digitalización”. De acuerdo con el presidente de Telefónica, este Pacto Digital presupone un nuevo diálogo entre los gobiernos, la sociedad civil y el tejido empresarial, con el fin de gestionar la transición digital poniendo a las personas en el centro.
Telefónica, como empresa digital y tecnológica, se ha revelado como parte de la solución, tanto desde la respuesta crítica de sus redes como desde el compromiso de su equipo humano con los clientes, proveedores y accionistas, y con la sociedad en su conjunto.
“La pandemia ha interrumpido muchas cosas -ha señalado José María Álvarez-Pallete-, pero otras muchas se pusieron en marcha. Se aceleró la energía transformadora de una empresa líder y de nuestros planes de cambio. Se hizo patente la resistencia y la capacidad de trabajo en situaciones adversas de nuestros equipos. Se puso de manifiesto que Telefónica estaba lista para desafíos que nadie imaginaba. Se evidenció la calidad de nuestro gobierno corporativo y el compromiso de nuestro Consejo de Administración. Y, sobre todo, se reforzó el vínculo que une a los propietarios de esta Compañía, sus accionistas, con quienes la dirigimos”.
“Sin nuestra empresa, -ha dicho dirigiéndose a los accionistas- todo hubiera sido distinto, todo hubiera sido peor”.
Álvarez-Pallete ha repasado igualmente en su discurso los principales logros del pasado ejercicio y el cumplimiento de los compromisos y objetivos financieros y no financieros. Los primeros, gracias a la consolidación de la senda de crecimiento, a la sólida generación de caja y a la reducción de deuda, de hasta 15.000M€ desde 2016. Los segundos, gracias al liderazgo de la compañía en factores medioambientales, sociales y de Gobierno Corporativo, al crecimiento inclusivo y sostenible y al avance en el compromiso de la compañía con el medio ambiente, ayudando a descarbonizar la economía con las distintas soluciones digitales y las redes de fibra.
“Nos reafirmamos como un gran motor de progreso social. En 2019 nuestra actividad tuvo un impacto en el PIB de los países donde operamos de más de 52.000 millones de euros, generamos 1,1 millones de puestos de trabajo directos e indirectos y realizamos una aportación fiscal de casi 9.000 millones de euros”, ha detallado.
También ha avanzado que “para este año 2020 nuestro objetivo financiero es optimizar la generación de caja. Y contamos con un balance sólido y una fuerte posición de liquidez para afrontar los vaivenes de esta crisis. Seguiremos invirtiendo, seguiremos reduciendo deuda y seguiremos manteniendo un dividendo atractivo y sostenible”. Y ha pormenorizado los avances de la ejecución de la Nueva Telefónica, presentada en noviembre sobre la base de cinco grandes pilares estratégicos para generar valor e impacto en los diferentes grupos de interés del grupo. Avances como el acuerdo alcanzado durante la pandemia con Liberty para fusionar O2 y Virgin Media en Reino Unido, la adquisición de más de 10.000 emplazamientos de Telefónica Deutschland por parte de Telxius, o la adopción de acuerdos de Cloud o Ciberseguridad.