Y es que pedir perdón o dar las gracias son costumbres muy sanas. Si todos los días hiciéramos el ejercicio de pedir perdón y de dar las gracias a los que nos ayudan en nuestras rutinas diarias, el sol saldría más radiante para todos.
“El agradecimiento es la memoria del corazón”. Y no lo decimos nosotros, sino el gran filósofo chino Lao Tsé. Otro grande de la historia, aunque mucho más contemporáneo, Johann Wolfgang von Goethe (1749-1832), poeta, novelista y dramaturgo alemán, afirmaba que “si nos encontramos a alguien que nos debe agradecimiento, enseguida lo recordamos. ¡Cuántas veces nos encontramos a alguien al que debemos agradecimiento y no pensamos en ello!”.
Normalmente nos referimos a ella como una emoción que se produce después de que una o más personas reciban algún tipo de favor o ayuda, pero también está dirigida a apreciar las acciones útiles de otras personas o incluso la apreciación de sus habilidades, o de un clima en el que el trabajo sereno es posible.
Lo que sí es cierto es que produce beneficios para nuestro bienestar emocional y físico que puede traducirse en:
Las investigaciones más recientes focalizan un modelo de gratitud desde una óptica mucho más amplia, porque no sólo se estudia aquella gratitud que surge como consecuencia de nuestra actitud de ayuda hacia otras personas, sino que también centra el enfoque en apreciar los aspectos positivos de la vida. Para que esta forma de abarcar el fenómeno sea útil, se analizan las diferencias individuales que perciben cada persona tanto en agradecimiento como en bienestar. Se da importancia a las relaciones interpersonales y también a las de salud. De esta manera, las investigaciones priorizan el funcionamiento humanísticamente orientado.
Lo que sí está fuera de toda duda, que la gratitud está fuertemente relacionada con el bienestar, lo que incluye afectos positivos y principios de ampliación y construcción de los mismos. Un ambiente cargado de tensión no es propicio para construir afectos y agradecimientos.
De nuestros análisis de cuál es el estado actual de las investigaciones en este campo de la psicología clínica, que es perfectamente aplicable –de ahí nuestro interés- al ámbito de las organizaciones, nos interesa en particular el nivel de emociones y sentimientos compartidos. Especialmente las relaciones entre los miembros de los diferentes equipos y/o departamentos, así como entre personal y directivos.
Las diferentes investigaciones se caracterizan por tener aún hoy una falta de acuerdo a nivel de la psicología clínica, en cuanto a la naturaleza de la gratitud, aunque sí en la psicología organizacional se consideras una emoción que se produce después de que las personas reciban ayuda que se percibe como costosa, valiosa y altruista. La afirmación es de los autores Wood, Malby, Stewart, Linley y Joseph, en 2008. Sobre esta base, varios investigadores han conceptualizado la gratitud como una emoción que siempre está encaminada a apreciar las acciones útiles de otras personas, concepto que suscribieron en 2001 autores como McCullough, Kilpatrick, Emmons y Larson.
Esta concepción, sin embargo, no capta completamente los aspectos de la vida que las personas denuncian como sus fuentes de gratitud. La gratitud puede surgir de fuentes tales como la apreciación de las capacidades de una persona, o de un clima en el cual determinado trabajo y la manera de llevarlo a cabo es la acertada.
Esto nos lleva también, a otras aproximaciones que las investigaciones clínicas han llevado a cabo y que son perfectamente aplicables a las relaciones interpersonales en las organizaciones. Tales circunstancias se manifiestan por el sacrificio que hacen personas agradecidas hacia otras en aras de un bien mayor. O sea, por el equipo, la empresa, el proyecto, etc.
En un estudio publicado en 2010 por la “American Psychological Association Journal Emotion” los investigadores descubrieron que “la gratitud funciona para mejorar el comportamiento económico cooperativo y no egoísta”. En el ámbito de las empresas lo traducimos como colaboracionismo profesional, cohesión de equipo, intereses compartidos, etc.
También sorprende en estos estudios determinadas situaciones que se daban, incluso cuando se trataba con extraños y no había perspectiva clara de reciprocidad, pero que igualmente los individuos agradecidos tomaron sus decisiones basadas en lo que era bueno para el grupo, a pesar de que estaban en contra de su intereses individuales.
La gratitud, según sostuvieron los investigadores, tuvo una influencia directa y positiva en el juicio que las diferentes personas hacían, lo que indicaba la formación clara de un criterio sobre determinado tema.
Las personas agradecidas son menos agresivas
En la Universidad de Kentucky, algunos estudiantes que formaron parte de una investigación, recibieron elogios por su escritura, cuando a otros se les hizo una evaluación cuyo resultado daba como regular. Esto generó una situación en la que los estudiantes jugaron un juego con la persona que había hecho la evaluación, en la que podrían hacer ruido cuando algo no les sentaba bien.
En general, los escritores evaluados como regulares, eran los que reaccionaban más violentamente generando el ruido. Aunque en el grupo de los evaluados como regulares, había algunos que fueron previamente instruidos para escribir ensayos sobre cosas por las que estaban agradecidos. Entonces, a pesar de haber sido calificados como regulares, los estudiantes que habían escrito sobre su gratitud eran menos propensos a hacer ese ruido fuerte en contra de su evaluador y críticos. Nathan Devall, que dirigió el estudio afirma que “la gratitud es algo más que sentirse bien, porque ayuda a las personas a ser menos agresivas mejorando su empatía”.
¿Cuál es la moraleja para el liderazgo efectivo y qué deben de tener en cuenta los líderes eficaces?
Sin duda existen diferentes personalidades de líderes, pero una cosa es cierta: la manera en que tratan a las personas que están bajo su mando, es enseñándoles el valor que significa la gratitud y el agradecimiento.
¡Cuántas carreras profesionales y personales se habrán malogrado por culpa de un mal jefe! En el presente, el liderazgo efectivo es uno de los campos del conocimiento en la “Teoría de las organizaciones” que más se ha desarrollado en los últimos diez años. La razón para que el buen liderazgo esté en vanguardia con los últimos conocimientos e investigaciones, es porque la clave de su ejercicio pasa más por lo humano que por lo técnico.
No despreciamos ni herramientas de dirección ni modelos de negocio. Pero sí debemos instar a todos los directivos, empresarios y profesionales que trabajan dentro y fuera de las organizaciones, pero que su esfuerzo es para y por éstas, a mejorar cada día los aspectos emocionales, que corresponden a un ámbito que tiene tremendo impacto en la cultura corporativa, en la motivación del personal y en el compromiso con la misión y objetivos. Pero por encima de todo, en haber logrado un ambiente libre de tensiones, en el que las personas estén satisfechas, tengan un nivel de felicidad razonable y vislumbren un futuro en sus vidas. Que vean que las cosas que se hacen en la empresa, es con un fin de mejora continua, que se vive bien en compañía de los diferentes compañeros/as y que existe una preocupación real por la vida de cada uno de ellos. Que forma parte de la cultura y filosofía de la dirección.
José Luis Zunni es director de ecofin.es y vicepresidente de FORO Ecofin. Director de ECOFIN Business School y coordinador de ECOFIN Management & Leadership. Director del Centro de Liderazgo de la EEN (Escuela Europea de Negocios) y coordinador académico de la Red e Latam del grupo media-tics.com. Miembro de la Junta Directiva de Governance2014. Conferenciante. Ponente de Seminarios de Liderazgo y Management de la EEN y coordinador del FORO DE MANAGEMENT Y NUEVA ECONOMÍA DE LA EEN. Autor de ‘Inteligencia Emocional para la Gestión. Un nuevo liderazgo empresarial’, coautor de ‘Liderar es sencillo. Management & Liderazgo’ y coautor con Ximo Salas de ‘Leader’s time (Tiempo del líder)’
Ximo Salas, Conferenciante, formador y asesor estratégico en RRHH y organización de empresas, con más de 20 años de experiencia como Consultor y Director de RRHH en diferentes sectores. Miembro de Ecofin Business School y Ecofin Management & Leadership. Co-autor del libro ‘Mejora y Gana’ (Manual de Marca Personal para la búsqueda de empleo, Editorial SC Libros 2013) y co-autor del libro ‘Leader’s Time (Tiempo del líder)’ junto a Jose Luis Zunni. Editorial APPdeLibros.Fundador de Crea Community (Social Media and Human Resources Company).Consultor, confrerenciante y formador. Miembro de la Junta Directiva de Governance2014.
Salvador Molina, presidente del Foro ECOFIN y consejero de Telemadrid