Nintendo ha dado cuenta de un serio ciberataque en su web y poco después Sony anunció que había sufrido otro el 6 de junio. Tras la noticia, la acción de Sony cayó un 3% en la Bolsa de Tokio.
El ya célebre grupo de ciberpiratas que se hace llamar lulzSeck ha reivindicado en su cuenta de Twitter su responsabilidad en el ataque a Sony Pictures Entertainment, tomando de su web los datos personales de 52.000 clientes. Sin embargo, afirman que entre sus objetivos no está Nintendo, aduciendo que "nos gusta mucho la N64". Nintendo, que tiene su sede en Kioto, manufactura las consolas Wii y 3DS.