Este pasado fin de semana tuve ocasión de visionar nuevamente el filme K-Pax (2001) de IainSoftley, magistralmente interpretada por Kevin Spacey (Prot) y Jeff Bridges (Dr. Mark Powell) lo que me hizo prestar atención a los diálogos como no lo había hecho la primera vez.
La crítica es casi unánime en cuanto a que las películas de ambiente psiquiátrico y en las que se describen de manera profunda las relaciones entre médico y paciente, siempre destacan por el gran contenido humano de sus diálogos, por supuesto también por el mensaje que nos hacen llegar.
¿Qué es lo que me hace vincular este filme a situaciones más próximas con las que debemos enfrentarnos en el día a día? Que a todos nos ha sucedido alguna vez, que aquella persona sobre la cual tenemos ciertas reservas, por ejemplo en un ambiente de trabajo, ante una circunstancia concreta, caso de una persona que sufre una lipotimia y todos se queda paralizados, es ella o él del que no imaginábamos que iba a saber cómo actuar prestando los primeros auxilios. Del mismo modo que lo que se describe en el filme, que el que en principio es un psicótico que se supone estuvo sometido a un fuerte trauma psicológico, está dibujando con sus frases una personalidad casi sabia y coherente. Esto es lo que desconcierta al Dr. Powell, por la precisión y originalidad de sus respuestas, así como la manera en que describe la realidad aquí en la tierra.
El Dr. Powell llega a la conclusión de que Prot le ha elegido, dándole un mínimo de verisimilitud a que realmente el paciente es un hombre que viene de un planeta lejano llamado K-Pax.
¿Por qué tiene esta reacción que incluso confiesa a uno de los miembros de su equipo? Porque con las cosas que dice su nuevo paciente, le hace reflexionar sobre el mundo, la vida, las costumbres, etc. Por ejemplo, en una de las sesiones se produce este diálogo:
- Dr. Mark Powell: Prot, ¿por qué has querido venir a nuestro planeta?
Prot: Bueno, he estado aquí muchas veces. Pero, ¿qué me trajo aquí primero? No lo sé. Pura curiosidad, supongo. Nunca antes había estado en un planeta Clase BA-3.
Dr. Mark Powell: Clase BA-3?
Prot: Estado temprano de evolución. Futuro incierto.
Lógicamente el impacto emocional que recibe el Dr. Powell es en la misma medida que ante tales respuestas reciben los que nos hemos adentrado en la historia y los personajes. No es nada nuevo lo que se dice de un planeta temprano. Ya el gran divulgador científico Carl Sagan que inmortalizó sus ideas y visión del cosmos, afirmaba en diversas ocasiones que la tierra como otros tantos mundos que se supone existen ahí fuera (en el universo),al llegar a un altísimo grado de tecnología se autodestruyen. Que si bien la tierra para los científicos es un planeta joven, la visión de Sagan coincidiría con la categorización que Prot le da a Powell sobre su futuro incierto.Que nuestra civilización tiene una fuerte vocación autodestructiva.
Sagan fue uno de los principales azotes de la carrera armamentística de las dos grandes potencias de la guerra fría. Decía que la cantidad de ojivas nucleares que se almacenaban por dichos países era algo obsceno que ponía en riesgo la continuidad de la especie humana.
Al Dr. Powell que en nuestra historia es un psiquiatra de reconocido prestigio en New York al que habitualmente le envían los pacientes psicóticos más difíciles de otros centros hospitalarios, le produce una duda razonable en cuanto a si efectivamente es un extraterrestre o el más complicado de los casos que ha atendido hasta que Prot entrara en su vida.
Lógicamente la duda va creciendo aunque siempre mantiene un resquicio de procedimiento científico de que todo debe ser debidamente verificado, lo que le lleva a buscar como sea, con los pocos datos que tiene quién es en realidad este personaje.
Su visión como psiquiatra le hacen acumular de manera ordenada y sistemática todas las evidencias que pueda reunir, porque en su mente sigue rondando la idea de que es un paciente que ha sufrido un evento trágico del cual su mecanismo cerebral le ha bloqueado los recuerdos a fin de superar el sufrimiento.
Finalmente el Dr. Powell llega a averiguar su verdadero nombre y en qué circunstancias trágicas había sido el momento que le produjo una amnesia como mecanismo defensivo y protegerse en una nueva identidad. De ahí que Powell le dice a Prot, sé quién eres y la respuesta de Prot es: “admitiré la posibilidad de que soy Robert Porter, si admites la posibilidad de que soy de K-PAX”.
En otro de los diálogos que no tienen pérdida las descripciones de Prot no sólo sorprenden a Powell, sino que lo encandilan.
Prot: ¿Sabes lo que he aprendido sobre tu planeta? Hay suficiente vida en la Tierra para llenar 50 planetas… plantas, animales, personas, hongos, virus…todos empujándose para encontrar su lugar, rebotando unos sobre otros, alimentándose unos de otros. Conectándose.
Dr. Mark Powell: ¿No tienes ese tipo de conexión en K-PAX?
Prot: Nadie quiere, nadie necesita. En K-PAX, cuando me voy, nadie me extraña. No habría ninguna razón para hacerlo. Y sin embargo, siento que cuando me vaya de aquí... me extrañarán. ¡Sí! Un sentimiento raro.
¿Cuál es el mensaje principal del filme?
Que no todo lo que se ve es lo que realmente es. Las cosas pueden parecernos de determinada manera, nuestra percepción puede jugarnos malas pasadas, aunque en el caso de Prot finalmente terminó confirmando su verdadera identidad y naturaleza humana, como era de suponer.
Pero hasta ese momento, todo un equipo de la unidad psiquiátrica de ese centro neoyorkino, abrigó ciertas dudas, algunos profesionales más que otros. Powell tenía justificación para tener menos dudas que los demás por la proximidad con su paciente.
¿Le engañó realmente Prot a Powell? En realidad más que un período de engaño fue uno en el que en el fondo le hubiera gustado que su historia fuese verdad, no la del trauma real de la violación y muerte de su mujer. Sino que era un visitante pacífico de un mundo lejano que sorprendía por sus conocimientos de astrofísica y por su lógica.
Esta impresión que Powell tenía no le dejó dejar de actuar a su parte científica de personalidad(como debe ser) para llegar a la verdad y poder curar asu paciente. Es evidente que el mensaje subliminal detrás del supuesto engaño que describimos, es el de actuar siempre con la verdad y de manera justa. No hay otra forma, de ahí la metáfora de Prot sobre el futuro incierto del planeta tierra y en que no había necesidad en K-Pax de distinguir entre el bien y el mal, como si más allá en el infinito universo lo único que prevalece es lo que Sagan llamaba “la armonía de los mundos”.