Las alianzas de medios europeos empiezan a ser habituales. La caída de ingresos publicitarios que van a parar a manos del duopolio de Internet lleva a empresas rivales a unirse para luchar en igualdad de condiciones contra un enemigo común. La prensa canadiense va en esa misma línea y lanza sus propuestas en busca de la supervivencia.
La Canadian Journalism Foundation reunió a un grupo de editores para hablar sobre el futuro del periodismo en una charla titulada ‘Un cambio constante: ¿cuáles serán los próximos pasos para los medios de comunicación?’.
Los colegas canadienses llegaron a la misma conclusión a la que se ha llegado en Europa. El nuevo propietario de ‘L’actualité’, Alexandre Taillefer, aseguró que los medios tienen en las plataformas de publicidad extranjeras “un enemigo común”. Por este motivo, propone a las compañías periodísticas trabajar juntas, “ya sea con una agencia publicitaria, para la monetización, o para los datos que podemos tener sobre los ciudadanos de Québéc. Google y Facebook no nos podrán quitar eso”. Taillefer incluso llegó a hablar de una cooperativa de información personal propiedad de los ciudadanos.
En cuanto a los modelos empresariales, Taifeller insistió en que la buena relación con el público ha de ser monetizada y la dependencia de los anunciantes reducida. En esta misma línea, Brian Myles, director de ‘Le Devoir’, señaló que dos tercios de sus ingresos provienen de las suscripciones. Su apuesta es por un modelo de suscripción con un muro de pago, porque se mostró convencido de que hay un nicho mercado que paga por la información de calidad.
‘La Presse’ abandonará el papel definitivamente en 2018 para ir completamente en digital. El editor Guy Crevier, tenía otro concepto de futuro, que pasa por contar con “una plataforma eficiente y fluida, y demostrar su eficacia, entre otros, a los anunciantes”. En su opinión, el problema es que para conseguirlo es necesaria “una transformación que tiene un coste elevado”. ‘La Presse’ obtiene ya entre 65 y 70 millones de dólares de ingresos por publicidad digital.
Los editores se lamentaron de que el gobierno no tenga interés por ayudar a los medios. Prueba de ello, señaló Myles, es que han puesto más publicidad en Facebook en seis meses que en todos los años precedentes.