Tim Berners-Lee, considerado el padre de Internet, ha destacado la importancia de la Web como herramienta para conseguir que el mundo sea un sitio mejor y resolver, dado su carácter universal y participativo, los problemas que hasta ahora no se han podido solucionar.
El creador de la Web, y director del Consorcio W3C, ha participado recientemente en el evento sobre Internet y nuevas tecnología Bilbao Web Summit y en él, aparte de recoger un premio por su invención, ha insistido en el carácter universal y la apertura de Internet: "Internet tiene que estar abierta a cualquier persona sin que ninguna gran empresa ni ningún Gobierno la limite".
En este sentido, y según las conclusiones del evento, los grandes retos para el porvenir de la Web no son técnicos, sino que provienen de la política pública, la regulación, los modelos de negocio o los intereses privados.
En su intervención, Berners-Lee explicó que en la actualidad el 20% de la población utiliza la Red, pero puso el énfasis en ese 80% restante que no tiene acceso a la sociedad de la información. Para solucionar esa brecha digital, tan importante, según subrayó, como las desigualdades sociales o sanitarias, hay que descubrir "qué hacer para que la gente entre en la sociedad de la información y procurar que el acceso a la Red se convierta en un derecho humano".
Sin embargo, continuó el fundador de la Web, se trata de que Internet sea accesible y "libre", pero no gratuita: "Las personas tienen que pagar el acceso a la misma".