‘Cinco Días’ fue el pionero de la prensa económica diaria en España y durante años tuvo una difícil andanza en soledad. Luego ha llegado a haber hasta siete diarios de información económica en España, gracias a los ingresos publicitarios de las grandes empresas, que más que hacer publicidad se pagaba un buen trato. La capacidad de influencia de estas cabeceras, aun con tiradas muy modestas, ha sido otra razón de esta proliferación. Históricamente, la prensa económica nació para publicar cotizaciones. Pero, ¿qué sentido tiene imprimir en papel cotizaciones o noticias de la economía del “sube y baja” en el mundo actual digital?
El diario ‘Expansión’ mantiene un lánguido liderazgo, con una difusión de poco más de 20.000 ejemplares, pero con unas pérdidas de 8,7 millones de euros en 2015. Es el único que no está en difusión mixta. Tanto ‘Cinco Días’ como ‘El Economista’ tienen en realidad una venta en quiosco casi testimonial. ‘Cinco Días perdió 34.000 euros en 2015 y parece ser que 2016 lo ha cerrado con unos pequeños números negros. Este diario tiene el más ajustado coste de plantilla, con poco más de 3 millones de euros. ‘El Economista’ no ha salido prácticamente de los números rojos desde su nacimiento, pero su web ‘ElEconomista.es’ tiene una relativa buena posición. En diciembre pasado tenía una audiencia de 9,5 millones de visitantes únicos, según OJD Interactiva. Pero tal vez lo más interesante radica en que algo más de 3 millones son audiencia en el exterior, esencialmente en América Latina. Esta puede ser una clave para el futuro de este diario, pues la audiencia digital en el mercado hispano es fundamental como estrategia de futuro. Sin embargo, deberá reducir sustancialmente su coste de plantilla, de más de 7 millones de euros, si quiere ser rentable solo en digital.
La prensa no diaria económica no está mucho mejor en España. ‘Actualidad Económica’ languidece con unas ventas reales en quiosco ínfimas y el resto apenas existe en difusión.
El panorama exterior es distinto, pero camina en el mismo sentido. La “biblia” de la prensa económica, el rosado ‘Financial Times’, ya no es británico, pues fue vendido a los japoneses del Nikkei. El otro referente del periodismo económico, el norteamericano ‘The Wall Street Journal’, empieza a atravesar importantes turbulencias. Está poniendo en marcha una “revisión de la versión en papel” y se enfrenta a un duro ajuste de costes.
Ha llegado la hora de que la prensa económica se enfrente realmente a su futuro digital.