El informe indica que los bancos se han centrado hasta ahora en mejorar únicamente sus interfaces, un cambio estético que convive con unas estructuras informáticas del pasado que ya se han quedado obsoletas.
“Los bancos están tratando de parecer innovadores y modernos, construyendo unas interfaces digitales increíbles, pero es como poner lápiz de labios en un cerdo: en última instancia, sigue siendo un cerdo y la nueva interfaz continúa ejecutándose sobre un sistema digital de back-end horrible”, explica Mark Mullen, CEO de Atom, en el informe. La banca no es el único sector que se ha digitalizado únicamente de cara al público, ya que es frecuente que muchas grandes empresas sigan trabajando con sistemas de hace décadas.
Los autores de este informe (que más bien parece una advertencia para los bancos) concluyen que existen dos caminos que marcarán el futuro de la banca: que mejoren lo suficiente y con rapidez para incorporar tecnologías avanzadas como el blockchain, la inteligencia artificial o el big data, o que las nuevas empresas digitales, las fintech, logren convertirse en bancos y terminen por acabar con los bancos tradicionales.
En el informe, elaborado por Alex Lipton, David Schrier y Alex Pentland, del Departamento Connection Science & Engineering del MIT, alertan de la llamada “banca invisible”: empresas, aplicaciones o plataformas cuyo negocio no es esencialmente el bancario, pero que integran servicios financieros que terminan por imponerse entre sus usuarios. Ponen como ejemplo las posibilidades de pago que ofrece WeChat, la popular aplicación de mensajería móvil que triunfa en China. A menudo se trata de start-ups que a pesar de su bajo presupuesto y de ser desconocidas, logran ganarse el favor del público por los servicios que son capaces de ofrecer.
“En los últimos cuatro años, la inversión de capital riesgo en fintech ha aumentado más de un 600%”, explican en el informe, lo cual demuestra que hay “miles de millones de dólares fluyendo hacia el sector”, con empresas “listas para perturbar el negocio de instituciones destacadas como Goldman Sachs, Morgan Stanley y UBS”.
El informe prevé la imposición de un nuevo sistema financiero copado dominado por la banca digital y las monedas virtuales. También vaticina la llegada del llamado “Banco de las cosas”, un sistema que aprovechará la inminente implantación masiva del Internet de las Cosas (IoT) para responder automáticamente a las necesidades financieras de los clientes a partir de los datos que recojan los sensores que invadirán nuestras vidas, casas, coches y objetos.