Las fronteras entre el mundo físico y el virtual son cada vez más finas. Conceptos como la realidad virtual o la realidad aumentada fusionan ambos mundos y muestran cómo la tecnología ha logrado conquistar nuestras vidas y que tiene potencial para seguir haciéndolo en el futuro. Un ejemplo reciente es la sutil forma que ha tenido Nintendo de infestar las calles del mundo real de pokémones con Pokémon Go, un fenómeno de masas que inicia un camino híbrido en el mundo del videojuego.
De Asia también llega otra tendencia que pronto será lo común: Alibaba, el Amazon chino, ha anunciado que abrirá una tienda virtual en la que se podrá (y deberá) comprar utilizando un visor de realidad virtual. La tienda es digital, está en Internet, pero las gafas de realidad virtual permitirán a los compradores “deambular” por ella y observar los objetos con precisión: será posible rotarlos para ver todas sus caras e incluso “probarlos”.
Por si fuera poco, la tienda estará regentada por un asistente robótico que ayudará al cliente e incluso le aconsejará sobre los productos que mejor se adaptan a sus gustos e intereses.
Se trata de una experiencia piloto que la compañía probará durante los próximos meses con la intención de convertirla en un asunto masivo durante este año. “La realidad virtual es una manera estupenda de probar productos o servicios, especialmente para algunas categorías como los muebles o los artículos de viaje”, ha explicado Zhuang Zhuoran, director senior del área móvil de Alibaba. “Además, añade más diversión a la compra”, añade. Tal vez sea esa la clave.