Una mujer estadounidense que perdió a su marido en un ataque de ISIS en Jordania ha iniciado una batalla legal en la que por primera vez se acusa a una red social de incumplir la Ley Federal de Lucha Contra el Terrorismo.
Tamara Campos, una mujer de Florida cuyo marido murió en noviembre en un ataque de Daesh a un centro de formación de la policía en Amman, ha decidido demandar a Twitter por auspiciar el crecimiento del grupo terrorista.
En su demanda, Campos asegura que “durante años, Twitter ha permitido conscientemente que el grupo terrorista ISIS use su red social como una herramienta para la difusión de propaganda extremista, recaudar fondos y atraer nuevos reclutas. Este material de apoyo ha sido fundamental para el surgimiento de ISIS y le ha permitido llevar a cabo numerosos ataques terroristas”, informa “The Wall Street Journal”.
El escrito viene acompañado de datos relevantes sobre la actividad del grupo extremista en Twitter, alegando que desde diciembre de 2014 se han detectado aproximadamente 70.000 cuentas relacionadas con Daesh, de las cuales al menos 79 eran oficiales y tuiteaban más de 90 veces por minuto. La demanda sostiene que esta red social ha hecho muy poco por detener esta actividad.
Abogados expertos en terrorismo aseguran que es muy difícil que la demanda prospere, ya que no se puede asignar la culpa a Twitter, que alberga, pero no es responsable de la creación de estos contenidos. Sin embargo, sí puede sentar un precedente y ayudar a que aumente la presión sobre las compañías de medios sociales para que censuren perfiles y mensajes relacionados con grupos terroristas.
Estado Islámico utiliza Twitter y YouTube para mostrar decapitaciones, llamar a la acción a personas de todo el mundo y pedir ayuda económica. Desde Twitter ya han expresado que, aunque consideran que la demanda carece de fundamento, les entristece la pérdida de esta familia y aseguran que las amenazas violentas y la apología del terrorismo no merecen un lugar en su plataforma.
La familia pide a Twitter que pague los daños ocasionados por violar la Ley Federal de Lucha contra el Terrorismo, al haber proporcionado apoyo material a los terroristas y resistirse a oír las solicitudes del Congreso y la candidata a la presidencia, Hillary Clinton, pidiendo que no se dé cobertura a estos grupos.
Obama, por su parte, ya ha creado un grupo de trabajo para tomar medidas contra los extremistas que utilizan Internet para promocionar su actividad y funcionarios de seguridad nacional se han reunido con ejecutivos de Silicon Valley para discutir qué más se puede hacer para frenar a estos grupos en la red.