Definitivamente, 2016 será el año de la realidad virtual. La salida al mercado del dispositivo de Oculus, el más completo de los conocidos hasta la fecha, cambiará completamente la manera en la que los consumidores ven el mundo que les rodea.
Si hay un stand que ha logrado llamar la atención de los visitantes de la feria de tecnología de consumo CES, ése es el de la compañía Oculus. Este importante evento ha coincidido con el inicio de los encargos previos de su casco de realidad virtual Oculus Rift a través de su página web. Los primeros envíos empezarán a salir el 28 de marzo y los consumidores podrán adquirir los dispositivos en tiendas en abril, aunque todos aquellos que han acudido a Los Ángeles ya han podido probarlos.
Nadie duda de las capacidades del considerado mejor casco de realidad virtual. Ni la NASA, que se ha asociado con Oculus para ofrecer a los visitantes una experiencia virtual del despegue del cohete más grande y potente del mundo que planea enviar a humanos a Marte en 2018.
Lo que sí ha sorprendido a muchos es su precio. Los modelos iniciales para desarrolladores costaban 300 dólares y las predicciones para la versión comercial apuntaban a que rondaría los 500 dólares. Finalmente, su precio será de 599 dólares (en Europa llega a los 699 euros). A esta cantidad hay que sumar la compra de un nuevo PC que sea capaz de soportar esta tecnología, por lo que se espera que el desembolso total alcance los 1.500 dólares si se adquieren conjuntamente. A pesar del alto coste, la demanda está siendo tan elevada que la web de la compañía ha presentado problemas para procesar los pagos.
Los usuarios que encarguen el dispositivo en la web recibirán el casco Oculus Rift, que cuenta con dos pantallas de alta resolución que eliminan el desenfoque por movimiento, sensores de infrarrojos externos y audio integrado para una experiencia de sonido envolvente. En el pack también se incluyen, entre otros, un mando para la Xbox One y los juegos EVE: Valkyrie y Lucky's Tale.