El estudio de Territorio creativo y The London School of Economics Enterprise señala que, a pesar de que un 70% de las empresas españolas han comenzado algún tipo de proceso de Transformación Digital, el enfoque es más táctico que estratégico.
Aunque se están acometiendo inversiones significativas en las áreas de Tecnología (que se lleva la mayor partida), Marketing y Ventas e Inteligencia de Negocio, los recursos asignados a Personas y a impactar sobre la cultura organizativa para optimizar los beneficios de la digitalización en el conjunto de la organización son aún insuficientes. En el ámbito del cliente, el acceso a los datos y su gestión eficiente no están lo suficientemente desarrollados, como tampoco lo está la utilización de herramientas digitales en las áreas de conocimiento, captación y fidelización.
No es de extrañar, por tanto, que la mitad de las empresas no se vea capacitada para abordar el proceso, bien sea por su dificultad, por la inexistencia de hojas de ruta o por puro desconocimiento del impacto que supone para el negocio, más allá de contar con web, canales sociales y venta online. En cuanto a los empresarios, sí son conscientes de que la Transformación Digital debe estar liderada desde Presidencia y Dirección General, pero solo el 50% de los Directores Generales asegura que estaría preparado para realizarla, y el 23% de la Dirección General de empresas de más de 50 millones de euros reconoce que no lo estaría en absoluto.
Por sectores, Consultoría, Energía y Automoción creen que sus empresas están capacitadas para abordar la Transformación Digital en cifras superiores al 50%. Los menos capacitados serían Banca y Seguros (38%), y Distribución y Retail (41%).
Las empresas con presupuestos que superan los 50 millones de euros invertirán entre 1 y más de 5 millones en procesos de Transformación Digital. En cambio, las que cuentan con menos de 50 millones realizarán inversiones inferiores a 100.000 euros en cada área de la organización.
Tecnologías como Internet de las Cosas, computación cognitiva y robótica, están muy alejadas de la mayoría de las empresas, incluidas las grandes, a pesar de su potencial.