Desde el origen de los tiempos, el ser humano es objeto de posibles amenazas de tipo físico y psicológico, a las que en la nueva era digital en la que nos encontramos inmersos tenemos que sumar las ciberamenazas y otros posibles ciberataques contra los que debemos luchar y protegernos de modo proactivo.
A su vez, hay que tener en cuenta que estos ciber-riesgos no son susceptibles de ser únicamente sufridos por el hombre si no que en el actual mundo digital, organizaciones públicas y privadas, entidades financieras y gobiernos son también blanco de los ataques en materia de ciberseguridad.
Por lo tanto, hoy ya no podemos hablar, simplemente de Seguridad, sino de un concepto mucho más amplio: Ciberseguridad.
Otro ejemplo de cómo la seguridad ha avanzado hacia la ciberseguridad, lo encontramos en el mundo financiero. Podemos tomar como punto de partida el sistema de los templarios, el que a través de claves secretas entregadas a los depositantes permitían controlar los fondos disponibles de los depósitos de cada peregrino, algo que puede entenderse como la primera carta de crédito-débito.
Y en la actualidad este sistema ha derivado (pero manteniendo la misma esencia de seguridad) a nuestros sistemas criptográficos financieros y tarjetas de crédito-débito.
Sobre toda esta evolución de la seguridad hacia la ciberseguridad y sus aplicaciones y desarrollo de planes para la Seguridad Nacional, empresarial y financiera trato en este post que espero sea de tu interés.
Puedes leer el post completo a través de este ENLACE