e-Latam

Tráfico de datos: por ahora, un negocio para las grandes operadoras

Argentina

Paul Manghi | Lunes 16 de marzo de 2015

La cantidad creciente de smartphones disparó la facturación en este concepto. Las plataformas de TV de pago sólo pueden acceder a una pequeña porción de tan sabroso pastel.



¿Hablar por el móvil? Qué antigüedad! El tráfico de datos es lo que mueve el negocio de la telefonía celular. Y no se trata de un fenómeno focalizado en un solo país o región, sino global. El European Information Technology Observatory (EITO), por ejemplo, vaticina que en Alemania los ingresos generados por los servicios de datos móviles superarán los diez mil millones de euros, mientras que la facturación por servicios de voz descenderán hasta los 9.700 millones de euros.

A muchísimos kilómetros de la casa de Ángela Merkel, más exactamente en el “fin del mundo”, es decir, en Argentina, puede verse el mismo fenómeno. En este caso utilizaremos como referencia el balance de Movistar Argentina. La filial de Telefónicadetalló que el tráfico de datos creció un 67,5%, en el ejercicio 2014, mientras los minutos comercializados sufrieron un descenso de 0,4%. Otro dato: los ingresos por datos explicaron el 47% del total facturado por la empresa.

Los números de Movistar encuentran su justificación en los 18 millones de teléfonos inteligentes que operan en Argentina, como así también en el 10% de los usuarios de Internet que sólo se conectan a través de su teléfono móvil.

Si bien no se tienen los datos de los otros dos grandes players del mercado, Personal y Claro, los analistas dan por seguro que sus números confirman la tendencia mostrada por Movistar Argentina. Sin embargo, y teniendo en cuenta que el negocio móvil crece según quien posea espectro, la pregunta que muchos analistas se plantean es qué sucederá con los operadores de la televisión de pago, como es el caso de Cablevisión o DirecTV, ya que el 5% de su capacidad (de acuerdo al modelo Operador Móvil Virtual), que los operadores de red están obligados a dar a terceros suena a muy poco para estas compañías.

Para el consultor Enrique Carrier, otra alternativa al modelo OMV sería el tan mencionado 4º operador, en teoría Arlink .En teoría, aclara, porque aún el gobierno no le asignó el espectro que ganó en la última licitación.

“Con una red vacía, un enorme esfuerzo físico y económico para desplegarla y una escasa capacidad comercial, el 4° operador podría ser, de hecho, un actor mayorista dispuesto a poner a disposición de terceros mucho más que el 5% de su capacidad mayormente ociosa por muchos años. Es por esto que los retrasos en la puesta en marcha del 4° operador son perjudiciales para toda la industria de las telecomunicaciones. Algo de lo que las autoridades parecen no haberse percatado aún”, subraya Carrier.

Por el momento, y a pesar del buen juego de las grandes operadoras argentinas, da la impresión que este partido también lo gana Alemania.