El Canal 2 de televisión, que durante décadas perteneció a la familia Sacasa, quedó ayer bajo el control total del mexicano estadounidense Ángel González, que junto a la familia presidencial mantiene un duopolio en la televisión nicaragüense.
Octavio Sacasa, que hace tres años vendió su mayoría accionaria y fungía como gerente de la estación televisiva, que un día fue pionera en tecnología y audiencia en el país, citó a los empleados del canal a una reunión para despedirse, según trabajadores de la estación televisiva que estuvieron presentes. Su cargo se lo entregó a Ignacio Barrera, un venezolano de toda la confianza de González, que ha trabajado en varios medios de comunicación del mexicano en América Latina.
Sacasa no negó ni confirmó a Confidencial anoche su despedida del Canal. Cuando se le llamó a su teléfono celular dijo que estaba en una reunión y que no daría ninguna declaración, antes de cortar la llamada abruptamente.
Antes de dejar el Canal, Sacasa anunció algunos cambios. Le notificó a la productora de TV Noticias, Claudia Sirias que quedaba removida de su cargo, y nombró en su lugar al periodista Arnulfo Peralta. Sirias dijo este viernes a Confidencial que su despido se le comunicó el propio Sacasa.
En Nicaragua, González controla ocho canales de televisión y doce estaciones de radio a través de Ratensa y Coasa.
Confidencial llamó anoche al gerente de Ratensa, Carlos Pastora, pero su secretaria dijo que estaba en una reunión.
Hace cuatro semanas Pastora dijo que se avecinaban cambios en el Canal 2 y anunció que estaban gestando una alianza con el grupo económico los hijos del presidente Daniel Ortega, que manejan cuatro canales de televisión, para bajar costos de operación.
Los medios de González en América Latina se caracterizan por buscar y aprovechar las ventajas del poder político y Nicaragua no ha sido la excepción. El mexicano estadounidense fue socio mayoritario en el oficialista Canal 4, bajo el dominio ahora del FSLN, pero cuando Ortega regresó al poder le devolvió el control mayor total de la estación televisiva. Desde entonces el estado le entregó la concesión de cuatro frecuencias para establecer nuevos canales de televisión.