La carrera por detener el paso del tiempo ha comenzado. Numerosos investigadores están muy cerca de encontrar la verdadera fuente de la juventud que pueda retrasar el envejecimiento, acabar con las enfermedades y prolongar la vida humana conservando las facultades de un joven de 20 años.
La vida eterna puede dejar de ser un deseo que forma parte del ámbito de la ciencia ficción en un futuro no muy lejano. Multinacionales y multimillonarios se han puesto al servicio de la ciencia para alargar la vida del ser humano más allá de los 120 años, manteniendo a pleno rendimiento sus condiciones físicas y mentales.
“Le Courrier International” recoge extractos publicados en varios medios sobre algunos de los avances que se están produciendo en todo el mundo para frenar el envejecimiento:
1. David Sinclair, genetista de Harvard, señala que “muchas sustancias que actualmente se están probando en el laboratorio ralentizan considerablemente el envejecimiento y retardan la aparición de la diabetes, el cáncer y las enfermedades cardíacas”. Él y su equipo administraron NAD a ratones, una coenzima que estimula las células para invertir su envejecimiento. Tan solo una semana después, los tejidos de los ratones más mayores parecían los de crías de seis meses. Extrapolado al ser humano, significaría que una persona sexagenaria y experimentada vuelva a tener la fuerza y vitalidad de un joven de 20 años en un abrir y cerrar de ojos.
2. La revista “New Scientist” lleva en portada las investigaciones de universidades como Harvard y Stanford que identifican el elixir de la eterna juventud con la GDF11, una proteína presente en la sangre joven que permite reparar el cerebro y el corazón. Tras haber realizado transfusiones de sangre entre ratones, han probado con plasma humano y están sorprendidos con los resultados: la GDF11 tuvo efectos beneficiosos en todos los órganos que han estudiado. Ahora se encuentran en la fase decisiva: llevar a cabo una transfusión entre humanos. Una de las patologías en las que han centrando es el Alzheimer.
3.”Todo está en los genes y en el colesterol”. Es lo que deduce “New Scientist” de los trabajos de un equipo de científicos del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas de Madrid. Estos expertos están estudiando el patrimonio genético de tres familias con miembros muy longevos. Comparando una parte de su ADN, el exoma, con el de 800 personas de longevidad más común, han comprobado que las tres familias poseen una mutación en el gen apolipoproteína B, una molécula conocida por reducir la cantidad de colesterol malo en sangre. También investigan el gen apolipoproteína E.
4. Calico, la startup de Google especializada en la prolongación de la vida, investiga enfermedades como la neurodegeneración o el cáncer. Google X, por su parte, trabaja con nanopartículas ingeridas en un comprimido que se adhieren a las células detectando el cáncer en una etapa incipiente. La empresa Pharmasset prevé desarrollar una pastilla contra la hepatitis C. La australiana Mesoblast ha realizado progresos considerables en la regeneración de tejidos a partir de células adultas, centrándose en reparar el músculo cardíaco después de un infarto de miocardio.
La medicina regenerativa es un lucrativo mercado que, según “Financial Times”, atrajo más de 1.000 millones de euros de fondos privados en 2013.