La compra de DirecTV le suma al proveedor de servicios inalámbricos unos 18 millones de suscriptores. También un rival de peso: América Móvil.
Cuando AT&T hizo pública su oferta de 48.500 millones de dólares por DirectTV, esa montaña de dinero escondía el interés de la estadounidense por el mercado latinoamericano, ya que la operación le permitirá al proveedor de servicios inalámbricos establecer su cabecera de playa en Latinoamérica, uno de los mercados que apuntan a ser de los más desarrollados, y que por ende aún no llegó a su techo, de la televisión de pago y la banda ancha móvil.
De hecho, el ingreso a América Latina se produce por la puerta grande. A golpe de talonario, AT&T se convirtió, de la noche a la mañana, en el principal proveedor de la televisión de pago de la región gracias a los 18 millones de suscriptores que cada mes pagan su cuota a DirecTV,.
AT&T argumentó la operación explicando que América Latina tiene un mercado poco penetrado de televisión de pago. “Alrededor del 40% de los hogares están abonados a esa modalidad de televisión, con una creciente clase media, y es el segmento de clientes de DirecTV de más rápido crecimiento", sostuvo en un comunicado de prensa.
Incluso, puedo verse la importancia de América Latina en la toma de decisión que llevó a la compra de DirecTV en la decisión de AT&T de desprenderse de su participación de siete mil millones de dólares en América Móvil, la joya de Carlos Slim, para suavizar el proceso regulatorio y ganar los negocios de DirecTV en la región, según los analistas. Con todo, este movimiento anuncia una batalla encarnizada entre los estadounidenses y el magnate mexicano por el negocio de la televisión de pago en América Latina
Las operaciones latinoamericanas de DirecTV representan el 95% de su crecimiento de suscriptores, pero solo 20% de sus ingresos. Como se dijo, el techo aún está muy lejos; mientras los soldados de Slim velan armas.