Se puede pisar, con cuidado. Lo justo hasta poner plano a este móvil panorámico y curvo de 6”. El G Flex de LG es el primer Smartphone del mundo en sumar pantalla, batería y carcasa curvas. Solo Nokia había hecho uno con pantalla curva, apenas imperceptible y que se quedaba ahí. El G Flex aprovecha la curvatura para hacer una pantalla panorámica y con sonido envolvente que revoluciona el multimedia. Los asiáticos, otra vez, vuelven a golpear primero.
No le presté atención a la innovación del móvil flexible hasta que lo vi. No veía interesante la flexibilidad, y tampoco veía muchas ventajas a eso de la curvatura. Fue ponerme una película en la panorámica y curva pantalla del G Flex y ya no pude despegar la vista de él. Es una experiencia totalmente distinta que supera con creces a la tenida en cualquier otro dispositivo móvil, incluso a las tabletas de 10”. Es tener el cine en tu mano y yo, que soy reacia a ver cine en el móvil, me encantó verlo en una pantalla que me envuelve, igual que el sonido, a pesar de su pequeño tamaño. Es verdad que se adapta a la forma natural del ojo humano. Su pantalla es P-OLED HD e incorpora el sistema de calibración de color Real RGB HD que da colores vivos y naturales.
Además de la experiencia de la imagen, el G Flex se adapta mejor a la cara. Recoge la innovación de sus hermanos de instalar los botones para manipular el móvil en su trasera, con lo que puedes darle órdenes con el dedo índice mientras hablas con él. Es tan cómodo como parece, y basta con tocar un par de veces la pantalla para encenderlo cuanto está boca arriba.
La autorreparación es otra innovación de este móvil curvo. LG ha inventado un armazón con la capacidad de autoregenerarse ante los arañazos y pequeños rasguños producidos por el uso cotidiano, no repara roturas por golpes. La pantalla carece de la película de Gorilla Glass que da dureza y una extrema resistencia, y es, precisamente, por la curvatura. Gorilla todavía no ha desarrollado esta tecnología.
LG ha cuidado el terminal. Incorpora una cámara principal de 13 MP y funciones como la iluminación del botón trasera cuando se detecta una cara con el modo enfoque “detección de cara” activado, con lo que el fotografiado sabe cuándo está enfocado, y puede quedarse quieto. La cámara delantera tiene 2,1MP. Una memoria internad de 32 GB da capacidad suficiente para guardar contenidos multimedia, y la RAM de 2GB da fluidez al multimedia. Incorpora es chip más avanzado de la industria (Qualcomm Snapdragon 800) para mejorar la calidad de los gráficas y aumentar el rendimiento de la batería, que dura 1,5 días (aprox.) con un uso exigente.
G Flex es 4G y NFC, y costará 799 € en el mercado libre. LG ha elegido a Vodafone para realizar el lanzamiento en España, en estos días. Los clientes particulares, autónomos y micropymes con planes de precios Base, Smart y Red del operador rojo lo podrán tener a partir de 159 € de pago inicial y 55 € al mes. Mejor consultar porque los precios se complican con las portabilidades, permanencias y tipos de contratos.
LG también llevó al MWC un mini, phablet de 5 y de 9”, y wearables como una pulsera podómetro que te pone las pilas cuando no andas lo suficiente y marida con el móvil, entre otras cosas. Pero yo no pude despegar los ojos de la panorámica pantalla del G Flex.