¿Cómo enfocar un negocio periodístico para alcanzar el éxito? Algunos medios están condenados al fracaso pero, ¿cuáles triunfarán? ¿Los nuevos medios se impondrán a los tradicionales? La herramienta Scanvine mide la frecuencia con la que se comparten historias en las redes sociales. Tras sopesar los resultados, todas las respuestas apuntan a un medio: BuzzFeed.
El mundo de las redes sociales se ha convertido en un gran aliado para los medios de comunicación. Por ello se creó la aplicación Scanvine. Esta herramienta, que mide el intercambio social de artículos, ha arrojado resultados sorprendentes que indican cuáles son las tendencias de los medios de comunicación, además de echar abajo algunas suposiciones previas.
Tras realizar un seguimiento a lo largo de un año, el creador de este sistema, Jon Evans, ha querido compartir en la web “TechCrunch” las conclusiones a las que ha llegado con respecto al éxito (o fracaso) de cada compañía en estas redes.
Una de las teorías que desmonta este estudio es la que señalaba que los medios tradicionales serían devorados por los nuevos. Aunque es evidente que los viejos medios se están estancando o incluso inician un lento declive, el panorama es mucho más complejo. Por un lado, hay claros repuntes a partir del 2 de diciembre, fecha en la que Facebook realizó cambios en el News Feed, destacando más los artículos interesantes y bajando los contenidos menos importantes. Esto benefició a todas las cadenas de televisión, que alcanzaron su máxima del año. Pero en esencia, los gráficos siguen siendo esencialmente planos. Aunque haya medios que prosperan, como “The Atlantic” o “CNN”, cuando se comparan sus datos con los de “TMZ”, “BuzzFeed” o el número uno, “Upworthy”, la impresión cambia.
Pero esto no significa que los nuevos medios estén superando a los tradicionales. “Business Insider” o “TechCrunch” presentan muy buenos datos, los de “The Verge” son espectaculares, pero “Gawker” o “Jezebel” registraron un leve, pero claro descenso en 2013.
Por lo tanto, Jon Evans ha llegado a varias conclusiones. Por un lado, que los nuevos medios suben, pero también caen más rápido que los tradicionales (“Upworthy” hoy va bien, pero no se puede asegurar que esto sea así mañana). Para los viejos medios, cambios como los del News Feed de Facebook pueden ayudar, pero tampoco de manera significativa. Entonces, ¿sólo un par de medios nuevos podrán codearse con los “The Guardian”, “NYT” o “The Economist” de turno o estos medios tradicionales serán reemplazados por los nuevos que a su vez serán rápidamente sustituidos por otros? Quizás ninguna de las anteriores. El éxito sólo lleva un nombre, el de “BuzzFeed”. Una web muy popular, viral y que ha sabido diversificar sus contenidos, ofreciendo desde vídeos a interesantes artículos de investigación.
Por otra parte, Evans ha constatado que muchos medios presentan una misma característica: un pequeño número de artículos virales se lleva la mayor parte de la atención de los usuarios y el resto, mucho más numeroso, consigue poca o ninguna. La razón es que esos medios permiten a los lectores leer varios artículos al mes de forma gratuita y luego les piden que paguen para acceder al resto. Ésta en principio es una buena idea. Sus artículos virales seguirán siéndolo, atrayendo a muchos usuarios, mientras que el grupo de noticias más numeroso se mantiene gracias a los suscriptores. La clave es saber cuántas noticias pueden ofrecerse de forma gratuita y, sobre todo, si hay mucha gente dispuesta a pagar después.
En un espacio en el que conviven tantos medios con sitios web libres, no todas las compañías se pueden permitir implantar muros de pago. Tienen que recurrir a la publicidad, que sólo es rentable en mercados altamente orientados. O, como novedad, incluir artículos no invasivos, disfrazados de información pero financiados por las marcas, la conocida como publicidad nativa o contenido patrocinado, como…sí, lo adivinaste: BuzzFeed.