La celebración de la Super Bowl es el acontecimiento del año para los anunciantes. Las marcas pagarán hasta 4’5 millones de dólares por la emisión de un anuncio de 30 segundos durante la retransmisión del partido. Pero este año se potenciará otro tipo de publicidad: anuncios personalizados enviados a teléfonos móviles basados en la ubicación física.
EE.UU. se prepara para vivir el mayor acontecimiento deportivo y comercial del año. La Super Bowl congregará ante el televisor a una audiencia cercana a los 110 millones de telespectadores en todo el mundo. Las marcas son conscientes de la importancia de aprovechar un escaparate como éste e invierten una gran parte de su presupuesto en colocar su publicidad durante la emisión del partido.
Pero este año se vivirá otra Super Bowl Ad Fest. Para todos aquellos seguidores que se encuentren en las inmediaciones del MetLife Stadium en Nueva Jersey o en el Boulevard de la Super Bowl, un tramo peatonal de 14 calles en pleno corazón de Manhattan en el que se desarrollarán diversas actividades gratuitas, podrán recibir alertas directamente en sus smartphones.
La NFL ha instalado transmisores inalámbricos en estos dos puntos clave para enviar mensajes a los teléfonos de los aficionados, informa “The New York Times”. A través de la aplicación “NFL Mobile”, los seguidores que acudan al estadio podrán recibir vídeos del partido o información para encontrar su asiento. Pero gracias a que se podrá conocer la ubicación exacta de cada usuario también en Times Square, será posible el envío de alertas con promociones de las tiendas más cercanas. Los transmisores, también conocidos como balizas, ya se han situado en más de 250 comercios y zonas públicas.
Características como la geolocalización siempre han resultado muy atractivas para las marcas, pero era el usuario el que debía decidir si quería activarlas. Gracias a la tecnología iBeacons de Apple, que emite señales incluso cuando el usuario no está ejecutando la aplicación, se podrá tener localizada a la persona en todo momento. La Super Bowl será el primer evento en el que se experimentará con esta tecnología, pero si tiene éxito, se instalará en otros estadios.
Las tiendas físicas ya se han mostrado encantadas con la iniciativa. Para sus responsables era muy importante conectar el mundo real con el virtual. Empresas como American Eagle podrán tener la oportunidad de enviar mensajes a los clientes con descuentos y recomendaciones de productos con tal precisión, que la información haga referencia sólo a los artículos de la sección en la que se encuentre una vez dentro de la tienda.
Aunque a esta tecnología no le faltan detractores que consideran que pronto surgirá un mercado de compra-venta de datos personales de los consumidores, las empresas ya se han apresurado a asegurar que este sistema sólo reportará beneficios a los clientes, como disfrutar de ofertas en sus productos favoritos u obtener informaciones que sean de su interés.
La línea entre ofrecer alertas interesantes y excederse hasta el punto de que los usuarios las consideren molestas es muy fina. Según "Forbes", los seguidores de la Super Bowl verían con mejores ojos otro tipo de iniciativas, como la que ha mostrado en un anuncio la marca de cervezas Lakemaid Beer: utilizar drones para transportar sus botellas. De momento sólo se trata de un guion publicitario, pero desde que el anuncio se convirtió en viral, han sido muchos los consumidores que han pedido a la empresa que lo ponga en práctica y surtan de cervezas a todo un estadio.
Ya hay un precedente en Sudáfrica. Durante la celebración de un festival de rock, los asistentes utilizaron una aplicación en su teléfono para pedir cervezas, que fueron lanzadas en paracaídas desde un avión no tripulado guiado por GPS. Aunque las leyes estadounidenses aún no lo permiten, Amazon ha abierto un mundo de posibilidades con su anuncio del futuro uso de mensajeros-dron.