Tras el smartwatch, la tecnología “wearable” da un paso más y desarrolla un anillo inteligente que permite realizar un seguimiento de lo que ocurre en el teléfono móvil personal sin necesidad de consultarlo continuamente.
Los usuarios de smartphones reciben diariamente cantidad de llamadas, mensajes y todo tipo de notificaciones en sus perfiles sociales. Por ello, se pasan buena parte del día entrando en las aplicaciones de sus teléfonos para consultar las novedades. Esta frenética actividad les hace perder tiempo e incomoda a las personas con las que se encuentran, a las que no pueden dedicar toda su atención.
Pero este problema tiene los días contados gracias al nuevo producto que ha irrumpido en el mercado de la tecnología “wearable”: Smarty Ring, el anillo inteligente. Este anillo mantiene al usuario conectado de una forma más sutil y eficiente. Sus creadores aseguran que, mientras una persona normalmente consulta su teléfono 150 veces al día, gracias a Smarty Ring ese número se reduce hasta un 60%.
El anillo se conecta al dispositivo iOs o Android a través de Bluetooth 4.0 y, tras descargar una aplicación en el teléfono, se puede personalizar el brillo de la pantalla LED, el volumen de la señal acústica o la asignación de botones de marcación rápida.
El cuerpo es de acero inoxidable, antialérgico, resistente al agua, unisex y viene en varios tamaños para que se ajuste perfectamente al dedo. Tiene unos botones en la parte exterior que sirven para aceptar o rechazar llamadas, reproducir música o activar la cámara del teléfono. En la pantalla aparece la hora y diferentes alertas, tanto de llamadas, como de mensajes, correos electrónicos o actualizaciones de Facebook, Twitter, Google Hangout y Skype.
El anillo tiene una característica muy interesante: emite un pitido cuando el teléfono está a más de 30 metros de distancia, lo que evita que se pueda olvidar en casa o que alguien pueda robarlo. Incluso alerta si el móvil se ha apagado.
Smarty Ring está alimentado por una batería de 22mAh que dura 24 horas y tiene una vida útil de tres años. La garantía incluye un cambio gratuito. Para recargarla, incorpora un cargador inalámbrico en el que se pueden colocar dos anillos y el teléfono al mismo tiempo.
La consecución de este proyecto ha sido posible gracias a la recaudación obtenida con la fórmula del crowdfunding. La web Indiegogo anunció que los donantes posibilitaron reunir los 40.000 dólares que se habían marcado como meta, llegando a acumular ya más de 162.000. Estas personas podrán adquirir un Smarty Ring a un precio de 175 dólares, 100 menos de lo que costará en el mercado, aunque no lo recibirán hasta abril.