La empresa de Toronto ha diseñado un traje a prueba de balas para los empresarios que tengan que viajar por trabajo a lugares peligrosos. Esta ropa ha sido diseñada con nanotubos de carbono, los mismos que se utilizaron para proteger a los soldados estadounidenses durante la guerra de Irak.
La firma canadiense de lujo Garrison Bespoke ha creado un traje antibalas a medida para ejecutivos. Su diseño no tiene nada que ver con los clásicos chalecos voluminosos utilizados en zonas de conflictos armados. La marca ha confeccionado un traje moderno, con estilo y que no restringe los movimientos.
A simple vista parece un traje normal de tres piezas, pero en su diseño ha sido utilizada la nanotecnología, la misma con la que fueron fabricados los uniformes de las tropas estadounidenses en Irak. La diferencia es que el material que ha patentado Garrison Bespoke es mucho más delgado, flexible y un 50% más ligero que el Kevlar.
Desde la compañía aseguran que esta oferta responde a las peticiones recibidas por un cliente de alto perfil que demandaba una protección en sus desplazamientos que no le supusiera renunciar al estilo y la discreción de sus trajes convencionales. Muchos ejecutivos como él tienen que viajar en ocasiones a lugares muy peligrosos en los que pueden verse envueltos en un tiroteo y, o bien se ven obligados a acudir a reuniones en lugares inseguros en los que peligra su integridad física o están condenados a llevar pesados y llamativos chalecos antibalas.
Este traje pretende actuar como un escudo discreto gracias a seis hojas de nanotubos escondidos dentro de la tela que, al endurecerse, retienen la bala e impiden que penetre en el cuerpo. La nanotecnología no sólo evita sufrir una herida por arma de fuego, además protege contra posibles intentos de apuñalamiento.
La armadura personalizada de Garrison Bespoke, además de segura y cómoda, cuenta con un diseño con mucho estilo para vestir al cliente a la moda. El traje fue puesto a prueba con diferentes armas y ha cumplido las expectativas, por lo que se rumorea que ya se han interesado por él algunos jefes de Estado y de gobierno.
“Hemos querido crear un auténtico traje de James Bond”, afirmó David Tran, la persona que ideó este diseño especial. Cada traje de la nueva colección “Town & Country” puede convertirse en un escudo a petición del cliente, ya que se confeccionan a medida. El coste mínimo de la prenda es de 20.000 dólares.